LOS VERBOS
Viví, la osadía
de haber nacido
lloré, la osadía
de haber amado
pagué la osadía
de haber crecido
sufrí la osadía
de haber volado.
Hoy puedo mirar muy asombrada
la titánica tarea
del existir.
No me quejo, mi alma ilusionada
opresa en el dolor, solía
reir
e inmácula luciendo
su linaje
peregrina doliente de este
mundo
de ensueños y poemas
hizo su equipaje
ovacionando todo con amor
profundo.
¡Cuan temeraria resultó
la hazaña!
de deambular con pundonor
ufano
sembrando ideas tronchando
la cizaña
y dando a luz los nardos
en mi mano
osé desafiar soberbía
altiva
el sucio pulular de los
gusanos
anhelaban tenerme de cautiva
en su cerco infeliz de áridos
llanos
yo siempre conjugué
vitales verbos
saboreando la esencia del
vivir
sin rencor, dolor u odios
acervos
conjugo paso a paso el verbo
de
morir.
|