RESEÑA DEL CLUB DE MONTAÑA DEL LICEO MANUEL MONTT.

 

 

 

El Club de Montaña del Liceo Manuel Montt fue fundado el 15 de abril de 1985, con la autorización del Rector del Liceo de Hombres don Benedicto Piccardo Olivos. Fue creado y asesorado hasta hoy por el Profesor don Sergio Santana Bohle.

Este grupo practica, de los deportes de montaña, la modalidad excursionismo de cordillera que son, en realidad, viajes a quebradas, cajones, valles cordilleranos y recorridos de altura que demandan cortas y largas caminatas, travesías, circuitos o recorridos de áreas, especialmente en baja y media montaña. Es una modalidad muy dinámica, a veces, con aproximaciones a ciertas alturas. Su práctica está considerada de gran aliento, porque el grupo está en constante desplazamiento. Nuestra extensa Cordillera de los Andes, hace posible que sea ésta la modalidad más conocida por los deportistas. El equipamiento, no especial, si adecuado, constituye otro elemento que posibilita su hábito generalizado.

Los objetivos del Club son muchos y todos tienden a la formación del niño o del joven que participa en sus filas, por ejemplo, acercarlos a la Naturaleza; satisfacer su espíritu aventurero; fomentarles el respeto por todas las formas de vida; enseñarles a seguir un rumbo y una dirección sin dificultades; ayudarles a adaptarse a la Vida Silvestre; fomentar la observación del Medio Natural; acostumbrar a los jóvenes a la preservación del medio silvestre; fomentar la observación del Medio Natural; acostumbrar a los jóvenes a la visión panorámica; desterrar en los niños y jóvenes cualquier temor hacia los elementos y fenómenos naturales; ayudarles a desarrollar fuerza y vigor; aprender a orientarse sin dificultad y poner en práctica los métodos de seguridad y de sobrevivencia; guiarlos en el campamento a valorar la vida del hogar; ayudarlos a desarrollar confianza en su capacidad física y espiritual; ayudarlos a aceptarse a sí mismo y los demás con sus aciertos y errores; aprender las técnicas de marcha y acampada, entre otros.

El currículo del Club es muy extenso, en estos catorce años de actividades se han efectuado viajes a distintos sectores del sur de Chile y de Argentina, de esas jornadas cabe destacar las siguientes: Isla Amortajado, Mar Brava, Las Chilcas, Astilleros, Huatrai, El Tepual-Río Negro, Senda Sur, Colonia Río Sur, Pichiquillaipe, Río Negro-Hornopirén, Lago General Pinto Concha, Lago Cabrera, Laguna Chaiquenes, Laguna Triángulo, Laguna Zargazo, Volcán Calbuco, Pucón-Pilmaiquén, Panguipulli-Maihue, Paso El León, Río Villegas (Argentina), Paso El Bolsón, Cerro Cabrito, Lago Vidal Gormaz, Aycara-Buill.

La formación integral del joven montañista pasa por las actividades que realiza directamente en la montaña (Campamentos, caminatas, trabajo en equipo, aproximaciones); también, por los talleres de trabajo en que se abordan temas como: Prevención de Riesgos, conocimientos de las modalidades de los deportes de montaña, manejos de la fogata, protección del cuerpo, higiene personal y ambiental, orientación, campamentos y marchas, cartografía, entender para conservar la mochila de excursión, que hacer en caso de perderse en la cordillera, pistas convencionales, preparación de una salida, uso de la brújula y del compás, primeros auxilios, nudos, amarres, pasarelas, alimentación e implementos.

Para participar en el grupo se debe realizar la inscripción del niño entre marzo y abril de cada año. La temprana edad con que se integran es importante para la continuidad, tanto del joven en el Club como para el grupo, en general. En la actualidad, gracias a esta política, es posible encontrar una identidad muy particular en ellos. Los requisitos fundamentales en cada montañista se resumen en una buena salud, alegría, disciplina, participación, imaginación, creación, respeto, responsabilidad, lealtad.

Todas las actividades del Club de Montaña están autorizadas por la dirección del establecimiento, por los apoderados de los niños y jóvenes integrantes que firman las autorizaciones y aportan con los recursos individuales de sus hijos. Las acciones de este grupo forman parte de las ACLES del establecimiento; por lo tanto, están sujetas a constantes evaluaciones. Su participación en él es totalmente voluntaria y así lo entienden la veintena de niños y jóvenes que lo integran.