Nada nos puede pasar
todas las bicis y los barcos
la ternura indefinida
y esas ganas de volar
nada nos puede pasar.
Compartimos la esperanza
que inventamos día a día
son esas pequeñas cosas
esa luz la que nos guía.
Nunca estás sóla
somos el refugio
ese remolino
ese gusto a río
Nunca estás sólo
siempre habrá más sueños
abramos las jaulas
cantarán los pájaros.
Siempre volvemos
prometemos cielos
nuevos juramentos
y el verano eterno.
Río de nuevos caminos
que otros pies han caminado
ex-secretos, escondites
que en el fondo se quedaron
penas que ya nos lastimaron.
Aunque el otoño se acerque
tengo aún mucho que andar
muchas cosas que decirte
nada nos puede pasar.
Nunca estás sóla...