Con mi título de periodista recién obtenido, decidí realizar una gran
entrevista, y mi deseo fue concedido, permitiéndoseme una reunión con Dios!
"Pasa" me dijo Dios, - "¿Así qué quieres entrevistarme? "
Bueno", le contesté, "Si tienes tiempo..."
Se sonríe y dice: "Mi tiempo se llama eternidad y alcanza para todo. ¿Qué
preguntas quieres hacerme?".
Ninguna nueva ni difícil para ti. ¿Qué es lo
que más te sorprende de los hombres?
Y dijo: "Que se aburren de ser niños, apurados por crecer, y luego
suspiran por regresar a ser niños.
Que primero pierden la salud para tener dinero y enseguida pierden el
dinero para recuperar la salud.
Que por pensar ansiosamente en el futuro, descuidan su hora actual, con lo
que ni viven el presente ni el futuro.
Que viven como si no fueran a
morirse, y se mueren como si no hubieran vivido, y que pensar que YO... "
Sus manos toman fuertemente las mías y seguimos en silencio.
Después de un largo tiempo, le dije: ¿Me dejas hacerte otra pregunta?
No me respondió con palabras sino sólo con su tierna mirada.
- Cómo Padre, ¿qué es lo que le pedirías a tus hijos para estos días festivos?
Que aprendan, que no pueden hacer que alguien los ame. Lo que sí pueden es
dejarse amar.
Que aprendan, que toma años construir la confianza, y sólo segundos para
destruirla.
Que lo más valioso no es lo que tienen en sus vidas, sino a quien tienen
en sus vidas.
Que aprendan, que no es bueno compararse con los demás. Pues, siempre habrá
alguien mejor o peor que ellos.
Que "rico" no es el que más tiene, sino el que menos necesita.
Que aprendan que deben controlar sus actitudes, o sus actitudes los
controlarán.
Que bastan unos pocos segundos para producir heridas profundas en las
personas que amamos, y que pueden tardar muchos años en sanar.
Que entiendan que a perdonar solo se aprende practicando.
Que hay gente que los quiere mucho, pero que simplemente no saben cómo
demostrarlo.
Que aprendan, que el dinero lo compra todo menos la felicidad.
Que a veces cuando están molestos tienen derecho a estarlo, pero eso no les
da derecho a molestar a los que los rodean.
Que los grandes sueños no requieren de grandes alas, sino del ejercicio de
la Voluntad con que se les dotó.
Que amigos de verdad son escasos y quien ha encontrado uno, ha encontrado
un verdadero tesoro.
Que no siempre es suficiente ser perdonado por otros; es más importante el
perdonarse a sí mismos.
Que aprendan, que son dueños de lo que callan y esclavos de lo que dicen.
Que de lo que siembran, cosechan ; si siembran chismes cosecharán intrigas,
si siembran amor cosecharán felicidad.
Que aprendan, que la verdadera felicidad no es lograr sus metas sino
aprender a ser feliz con lo que tienen.
Que aprendan, que la felicidad no es cuestión de suerte sino producto de
sus decisiones.
Ellos deciden ser felices con lo que son y tienen, o morir de envidia y celos
por lo que creen que les falta y carecen.
Que dos personas pueden mirar una misma cosa y ver algo totalmente diferente.
Que sin importar las consecuencias, aquellos que son honestos consigo
mismos llegan lejos en la vida.
Que a pesar de que piensan que no tienen nada más que dar, cuando un amigo
llora con ellos encuentran la fortaleza para vencer sus dolores.
Que retener a la fuerza a las personas que aman las aleja más rápidamente
de ellos y el dejarlas ir, las deja para siempre al lado de ellos.
Que a pesar de que la palabra "amor" pueda tener muchos significados
distintos, pierde valor cuando es usada en exceso.
Que aprendan que amar y querer no son sinónimos sino antónimos, el querer
lo exige todo, el amar lo entrega todo.
Que nunca harán nada tan grande para que Dios los ame más, ni nada tan malo
para que los ame menos. Simplemente los amo, a pesar de su comportamiento.
Que aprendan que la distancia más lejos que pueden estar de Mí es la
distancia de una simple oración. ...
Y así, en un encuentro profundo,
tomados de las manos, continuamos en silencio.