CRISTO JESÚS Y SUS PARIENTES
CRISTO JESUS terrenal, no madre de Su espíritu, pues El existía antes de que naciera María (Juan 1:1-2; 8:58), siendo aquel Verbo que estaba con Dios en el principio. María jamás reclamó que la adoraran.. Expresándose con humildad admirable dijo: "Y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador porque ha mirado la bajeza de su sierva" (Lucas 1:48) "Bajeza" y "Sierva" no son términos que usara una "diosa madre". También dijo: "de ahora me dirán bienaventurada todas las generaciones" (Lucas 1:48) Así le dicen los creyentes verdaderos, honrándola como mujer ejemplar, sin llegar a endiosarla, cosa que ella misma hubiera repudiado, sin lugar a dudas, con sus fuerzas pues no se exaltaba a si mismo, sino que su Hijo diciendo "Haced todo lo que os dijere" (Juan 2:5). Ni José, el marido de María, ni Zacarías, el esposo de Elisabet, ni los pastores que fueron a Belén (Lucas 2:8-20), ni Simeón (Lucas 2:21-32), ni Ana la profetisa (Lucas 2:36-38), ni Juan el Bautista, ni los apóstoles veneraron a María, sino al Hijo. Jesús honró a su madre, más no la venero ni enseñó que la venerásemos. Cuando una mujer le dijo "Bienaventurado el vientre que te trajo, y los senos que mamaste", respondió El: "Antes bienaventurados los que oyen la palabra de Dios, y la guardan" (Lucas 11:27-28). Era oportuno en grado sumo el momento para exaltar a Su madre. En vez de hacerlo, enfocó lo más importante para el hombre, a saber: No enaltecer a otros seres humanos, ni siquiera Su propia madre terrenal, sino guardar la Palabra divina. Claramente indicando que su madre María no tenía poderes especiales sobre El, también dijo: " ¿Que tienes conmigo, mujer ?" (Juan 2:4). Mediante palabras tales, deliberadamente ponía distancia entre su propia Persona y su madre carnal. Enseñaba que ni siquiera la mujer por medio de la cual se encarnó ocupaba en su corazón un lugar de más importancia que los demás salvos, diciendo, cuando ella deseaba hablarle: "¿Quién es mi madre?.... Y extendiendo su mano hacia los discípulos, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos. Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ése es mi hermano, y hermana y madre" (Mateo 12:46-50). Ahora bien, pueda ser que el corazón de los que veneran a María resista las implicaciones ineludibles sobre la adoración a María que de las palabras tajantes de Cristo se desprenden. Sin embargo, el intelecto imparcial, iluminado y honesto, tendrá que admitirlas. No podrá hacer caso omiso a la explicación dada por Cristo mismo sobre las relaciones entre El y su madre carnal. Esas relaciones no le daban a ella derechos sobre El, ni siquiera el derecho de reclamar que le atendiera, dejando de enseñar a los demás. No significaban que pudiera tener libre acceso a su Persona y poderes de "intercesora". María no tenía poderes intelectuales sobrenaturales. ¡Ni siquiera entendió las palabras pronunciadas por su Hijo cuando tenía éste sólo doce años de edad! (Lucas 2:40). Después del nacimiento de Jesús, María se unió a su esposo José y tuvieron hijos e hijas. Tome en cuenta , estimado oyente, las evidencias contundentes: El ángel dice: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer" (Mateo 1:20) "Recibir a tu mujer<2, es decir recibirla como esposa legítima con todo lo que implica la relación natural matrimonial. Y recibió a su mujer. Pero no la conoció hasta que dio a Luz a su hijo primogénito" (Mateo 1:24-25) "Hasta que" significa que, de cierto, la conoció después del nacimiento de Jesús. No hay lógica que refute esta conclusión. Jesús era el "primogénito" de María. Quiere decir, el primero de todos los hijos de ella "Unigénito" no, sino "primogénito", el primero de todos los que de ella nacieran. José y María, viviendo como esposo y esposa en la misma casa, criaron a Jesús. María hasta se refiere a José como "padre" de Jesús (Lucas 2:41-52). María no comprendía todo lo concerniente a su hijo Jesús (Lucas 2:19-50-51), ni hay la más mínima implicación que intentara ella conservar su virginidad porque se considerara "MADRE DE DIOS" Las tantas referencias en las Escrituras a los Hermanos de Jesús constituyen prueba irrefutable de que José y María engendraron más hijos. Sus relaciones matrimoniales eran naturales. No vivieron en celibato los dos. María presenció la crucifixión de su Hijo (Juan 19:25-26). Después de la resurrección y la ascensión, se reunía con los 120 (Hechos 1:14) durante los días antes de Pentecostés. De Pentecostés en adelante no se hace referencia alguna a ella. No se sabe cuando o dónde murió. De haber perseverado en santidad hasta el fin de sus días, al morir "en Cristo", su espíritu habrá ido al paraíso. lugar adonde van las almas de todos los justos (Lucas 16:24). Lo cierto es que no ascendió al trono de Dios ni sirve como "Intercesora", pues hay "un Sólo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre" (Ira. Timoteo 2:5). Siendo mujer judía fiel, María jamás se hubiera inclinado delante de imágenes (Exodo 20:1-6), ni las hubiera permitido en su hogar. Por lo tanto, es del todo inconcebible que aprobara ella la fabricación de imágenes de su propia persona. Sin duda alguna, le hubiera sido escandalosa en extremo la veneración a tales imágenes. No obstante, ya para fines del cuarto siglo de esta era cristiana estaba en pleno desarrollo el movimiento de exaltar y venerar a María como "Madre de Dios" y, de ahí a poco tiempo, también aprobaron el uso de imágenes. SUS HERMANOS Y HERMANAS CARNALES No se trata de primos, ni de hermanos espirituales, sino de los hermanos carnales de Jesús. Los contextos y las circunstancias de los pasajes donde se mencionan éstos no admiten otra interpretación. MATEO 12:46-50 "Su madre y sus hermanos estaban fuera" Los apóstoles y los demás discípulos ya estaban con el Señor. Por lo tanto, se distingue entre sus "hermanos" y sus discípulos. Estos eran sus "hermanos espirituales"; aquello, sus "hermanos" carnales. MATEO 13:53-58. Los de Nazaret conocían íntimamente a José, María y los hermanos y las hermanas de Jesús. Los hermanos se llamaban Jacobo, José, Simón y Judas. El pueblo de Nazaret sabía que estos cuatro hermanos carnales de Jesús, identificándolos como tal, no como "PRIMOS". JUAN 2:12 "Después de esto descendieron a Capernaum, él, su madre, sus hermanos y sus discípulos; y estuvieron allí no muchos días" (Hechos 11.26) JUAN 7:5 "Porque ni aún sus hermanos creían en él". Sus discípulos sí; sus hermanos carnales no. JUAN 19:25 " Estaban junto a la cruz de Jesús su madre, y la hermana de su madre, María mujer de Cleofas y María Magdalena". HECHOS 1:12-15. Los hermanos, ya creyendo en Jesús, se encontraban entre los 120 que se reunían después de la ascensión. I. Corintios 9:5. Sus hermanos se casaron. SU FAMILIA ESPIRITUAL Como hijo ejemplar, Jesús siempre honraba a los miembros de su familia terrenal. Sin embargo, dio a entender, como ya lo hemos visto, que la familia espiritual tenía más importancia para EL. "¿Quién es mi madre, y quiénes son mis hermanos?... Todo aquel que hace la voluntad de mi Padre" (Mateo 12:46-50). "Todo aquel". ¡Todos podemos pertenecer a la familia espiritual de Jesús! ¡Privilegio increíblemente maravilloso! Podemos ser adoptados como hijos en la familia divina, celestial, y ser "hijos de Dios. Y si hijos también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo" (Romanos 8:14-17) ¡Qué dicha! Llegando nosotros por medio de la obediencia (Hebreos 5:8), a tener el mismo Padre (Juan 20:17). Jesús "no se avergüenza de" llamarnos "hermanos" Hebreos 2:11-12). ¡Qué honor inigualable!. ¿Pertenece usted, estimado lector, a la familia espiritual de Jesús? ¡Ha hecho "la voluntad" de su Padre? ¿Tiene una fe verdadera basada, no en las tradiciones y los sentimientos religiosos, sino en la enseñanza pura del Hijo de Dios? ¿Vive como El? ¡Ha sido bautizado como El? ¡Sumergido en agua como El fue sumergido en el río Jordán? ¡Conoce la iglesia espiritual que estableció El? ¡La que fue establecida mucho antes del tiempo cuando fueron escritas las leyendas y fábulas en torno a la familia terrenal de Jesús? La misma que fue establecida mucho antes de la introducción de imágenes en el culto a María. Puede conocerla estudiando el Nuevo Testamento. Puede salvarse eternamente obedeciendo "la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta" (Romanos 12:2).
CRISTO JESUS
SUS PARIENTES TERRENALES
SU FAMILIA CELESTIAL
SU PADRE No tuvo padre terrenal. Fue "Concebido del Espíritu Santo" (Mateo 1:18-25). "El poder del Altísimo" cubrió a María "con su sombra por lo cual también el Santo Ser" que nació se llamó "Hijo de Dios" (Lucas 1:35). José, su padre de crianza, era de la casa de David (Lucas 2:4). Era carpintero (Mateo 13:55). Jesús se crió en la casa de José, estando aún con él cuando tenía doce años de edad (Lucas 2:41-52). Las palabras de Mateo 13:55 implican que José todavía estaba vivo para el tiempo del ministerio de Jesús. Se deduce que Jesús vivió con él hasta el día en que, teniendo ya como treinta años de edad (Lucas 3:23), comenzara su ministerio. El verdadero "Padre" de Jesús es Jehová Dios. Para Jesús Jehová es "el único Dios verdadero" (Juan 17:3) y es su "Dios" y su "Padre" (Juan 20:_17). Jesús y su Padre son uno (Juan 10:30) en naturaleza, mente y propósito como todos los creyentes verdaderos son uno (Juan 17:20-23), más Jesús no es el Padre mismo, ni es el Padre Jesús, sino que los dos son dos seres espirituales distintos. ¿No dijo Jesús: "El Padre mayor es que yo" (Juan 14:28)? ¿No sabe el Padre más que Jesús? (Marcos 13:32). ¿No dice I. Corintios 15:28, que cuando venga el fin se someterá Jesús mismo al Padre? Pues, son distintos, teniendo cada uno su propia identidad?. SU MADRE No tiene una madre celestial. Es decir, no hay en el cielo alguna "diosa madre" que engendrara a Jesús. Su madre terrenal era María, María aún era virgen cuando concibió del Espíritu Santo (Mateo 1:23; Lucas 1:26-27). Ella era, en cuanto a su naturaleza humana, una mujer tal cual las demás. Su cuerpo físico lo habían engendrado sus padres terrenales. (Los nombres de ellos se desconocen). Y su espíritu lo había dado Dios (Eclesiastés 12:7). No era ella una "diosa", ni lo es ahora. María era una virgen sana y justa, consagrada a Dios. Fue escogida como instrumento mediante el cual tomara el Cristo cuerpo de carne y sangre, naciendo de mujer (Gálatas 4:4; Filipenses 2:5-11; Hebreos 2:14-18). Durante su vida, María nunca fue endiosada. No la adoraron jamás, Considere: El ángel que trajo a María las noticias de que Dios le había escogido a ella para ser la madre de Jesús no la adoró. Le dijo: "¡Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres..... Has hallado gracia delante de Dios". Luego "Se fue de su presencia" sin adorarla, sin llamarla "madre de Dios" (Lucas 1:28-38), sin venerarla. Elisabet, la madre de Juan el Bautista, no le venero. Visitando María a Elisabet, ésta le dice: Lucas 1:42 "Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre.", más no le rindió culto como si fuera María una diosa, más poderosa que el mismo Señor, por ser madre de El. Si, era madre de El - madre de Su cuerpo
Que Dios le bendiga, son los deseos de los miembros de la Iglesia de Cristo
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