Cortesia de la Iglesia de Cristo-Pedregal Panamá
Autores Extranjeros
LA IGLESIA DE CRISTO NO ES SECTARIA
por Roy H. Lanier
INTRODUCCION
"Un cuerpo" (Efesios 4:4); "... la iglesia, la cual es su cuerpo" (Efesios 1:22-23; Colosenses 1:18). Por lo tanto hay una iglesia. Jesús dijo: "... sobre esta roca edificaré mi iglesia" (Mateo 16:18), no dijo "mis iglesias"; el Señor edificó su iglesia, solamente una. "Así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador" (Efesios 5:23). Por eso, él es el salvador de la iglesia. No hay escape del hecho de que el Señor edificó una y solamente una iglesia. Los predicadores de las sectas principales ya han dejado de contender que la Biblia habla de más de una iglesia. Nos satisface saber que están conscientes de que existe una sola iglesia, pero ahora afirman otro concepto. Dicen que toda persona que ha hecho profesión de fe es miembro de la iglesia universal para entonces unirse a la secta de su preferencia. La idea de unirse a la secta de su preferencia es lo que queremos considerar en este estudio presente. ¿Hay autoridad bíblica para unirse a otra cosa después de ser miembros de la iglesia que es la familia de Dios?
¿DE CUAL SECTA ERAN LOS APOSTOLES?
Nadie puede negar que los apóstoles eran miembros de la iglesia que Jesús edificó. Pregunto: ¿Se unieron a la secta de su preferencia? Si fue así, ¿a cuál secta se unió Pedro? ¿Fue que Juan escogió otra? ¿Me puede decir el nombre de la secta? ¿Existió alguna de las sectas de hoy en día en aquél entonces?Según los historiadores eclesiásticos, ninguna secta, excepto la Iglesia Católica, puede trazar su existencia más allá del siglo decimoquinto y la Iglesia Católica no puede encontrar organización y sus doctrinas peculiares más allá que el sexto siglo. Si ninguno de estas sectas existían en los días de los apóstoles, la conclusión lógica es que ninguno de los apóstoles eran miembros de ellas. ¿Se unieron los apóstoles a algo después que eran miembros de la iglesia que algunos ahora se placen en llamar "la universal", la iglesia que Cristo edificó? Si así lo hicieron, no hay ni una sola palabra al respecto en el Nuevo Testamento. Concluimos que no lo hicieron, porque en este libro tenemos todo lo que pertenece a la vida y a la piedad (2 Pedro 1:3).
¿INSTRUYERON LOS APOSTOLES A LOS RECIEN CONVERTIDOS
A UNIRSE A LA IGLESIA DE SU PREFERENCIA?
Todos los apóstoles eran miembros de la iglesia que edificó Jesús. ¿Te gustaría ser miembro de aquél cuerpo religioso del cual ellos eran miembros? La gente de aquél entonces se sintió así. Quisieron ser parte de la iglesia donde los apóstoles del Señor eran miembros. Seguramente los apóstoles, siendo inspirados, supieron cuál era la iglesia correcta para poner su membresía. Y si es correcto unirse a algún cuerpo religioso después de que haya llegado a ser miembro de la iglesia que el Señor edificó, seguramente los apóstoles supieron y hubieron animado así a las personas que convirtieron. Cuando el Espíritu Santo vino sobre los apóstoles, Pedro predicó un gran mensaje; la gente creyeron y preguntaron qué hacer para ser salvo. Pedro dijo a estos creyentes que se arrepintiesen y que se bautizaran en el nombre de Jesucristo para el perdón de los pecados (Hechos 2:38), y que cuando hicieron esto el Señor los añadiría a la iglesia (Hechos 2:41, 47). Ahora, ¿a cuál iglesia, tú crees, los añadió el Señor? ¿Estás dispuesto a decir que los añadió a la iglesia que él mismo edificó? Así que, en aquellos días cuando los creyentes se arrepintieron y fueran bautizados, el Señor los añadía a la iglesia que él mismo había edificado. Todos los creyentes arrepentidos y bautizados para el perdón de los pecados fueron añadidos a la misma iglesia; todos eran miembros de la misma iglesia. Ahora, ¿animaron los apóstoles a dividirse en grupitos pequeños, sectas para que cada uno pudiera tener "la iglesia de su preferencia?" Había tres mil convertidos en el primer día, así que tuvieron mucho material para organizar diez sectas. Entonces, al poco tiempo, tal vez el próximo día, "el número de los varones era como cinco mil" (Hechos 4:4). Más tarde, "y los que creían en el Señor aumentaban más, gran número así de hombres como de mujeres": (Hechos 5:14) y "el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén; también muchos de los sacerdotes obedecían a la fe" (Hechos 6:7). Seguramente había material suficiente para varias sectas grandes, pero no hay ni una sola palabra que indica la división en diferentes sectas, enseñando doctrinas contradictorias. "Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles" (Hechos 2:42). Los apóstoles no enseñaron doctrinas contradictorias ni tampoco enseñaron doctrinas conflictivas a los convertidos. Las sectas hoy enseñan doctrinas contradictorias. Por lo tanto, no todos sigan la doctrina apostólica. Si fuera así, sus doctrinas no serían contradictorias sino que estarían de acuerdo, así como los apóstoles estuvieron de acuerdo el uno con el otro. Pero tenemos evidencia de que estos convertidos por los apóstoles no se dividieron en sectas, creyendo y enseñando doctrinas contradictorias. "Y la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma" (Hechos 4:32). Esta es una expresión que indica la unidad de la fe y de propósito. Pablo animaba sus convertidos en Filipos a estar "firmes en un mismo espíritu, combatiendo unánimes por la fe del evangelio" (Filipenses 1:27).
LOS APOSTOLES DESANIMARON LA PRACTICA
DE UNIRSE A LA IGLESIA DE SU PREFERENCIA
No sólo los apóstoles desanimaron a la gente de dividirse en sectas, realmente condenaron esta práctica. En Corinto, Pablo había establecido la iglesia por predicar el evangelio, tanto que "muchos de los corintios, oyendo, creían y eran bautizados" (Hechos 18:8). Al hacer esto, eran añadidos a la iglesia así como aquellos que hemos estudiado en Hechos 2:38-47; y fueron añadidos a la misma iglesia, el cuerpo de Cristo, la única diferencia siendo su ubicación geográfica. Cuando la iglesia era bien plantada, Pablo sé despedía de ellos para predicar por otras partes.Al poco tiempo de haberse ido, empezaron a formar sectas, idénticas en naturaleza a las sectas moderna de hoy en día. Formaron cuatro grupos, uno le llamaron por Pablo, otro por Apolos, otro por Cefas (Pedro) y otro por Cristo (1 Corintios 1:10-17). En ves de Pablo agradecerle a Dios por estas sectas, para que cada uno pudiera unirse a la de su preferencia, los condenó como carnales. "Porque aún sois carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres? Porque diciendo el uno: Yo ciertamente soy de Pablo; y el otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois carnales?" (1 Corintios 3:3-4). La actitud de Pablo armonizaba con la de Cristo cuando oró, "Mas no ruego solamente por éstos, sino también por lo que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste. La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno. Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste" (Juan 17:20-23).
EL CAMINO SEGURO
Cómo los apóstoles no se unieron a ninguna secta, sino que simplemente eran miembros de la iglesia que Jesús edificó, y como no animaron a sus convertidos a dividirse en sectas para que tuvieran la iglesia de su preferencia, y como Jesús oró para que todos los que creyeron en él por la palabra de los apóstoles pudieran ser uno como él y el Padre eran uno, y como estas cosas son ciertas, ¿qué vamos a hacer al respecto? ¿Qué sería lo más seguro que podemos hacer? Que el mundo desestime estos ejemplos y principios del Nuevo Testamento si quieren, pero para mí y los míos, vamos a hacer lo que los apóstoles enseñaron la gente para ser salvos y para que el Señor nos añada a la misma iglesia a la cual añadieron aquellas personas hace tanto tiempo atrás; Nosotros no vamos a unirnos a ninguna cosa a la cual los apóstoles no se unieron ni animaron a otros a unirse y que Pablo condenó en Corinto.Después de llegar a ser miembros del único cuerpo, que es la iglesia que el Señor edificó, vamos a asociarnos con otros que han hecho lo mismo que los apóstoles enseñaron, para adorar con ellos y seguir la obra del Señor. El grupo que así se asocia, guiados solamente por la palabra de Dios, será el cuerpo de Cristo, una iglesia de Cristo. No puede ser una secta como la iglesia en Jerusalén no era una secta. De esta manera vamos a restaurar al mundo al cristianismo así de puro como cuando era bajo la dirección de los apóstoles. De esta manera y para este propósito todos los creyentes pueden y deben unirse. Señor, que aligera el día para cuando esta rogativa sea predicada en cada púlpito por todo el mundo y que sea aceptable a sus oyentes.
¿CUANTAS SECTAS HACEN FALTA HOY DIA?
Todavía queda el hecho de que existen cientos de organizaciones religiosas distintas y diferentes, comúnmente llamadas sectas o denominaciones. Ya hemos probado que el Señor no estableció ninguna de las sectas que ahora existen y que los apóstoles no eran miembros de ninguna secta y que condenaron el espíritu sectario y partidario. ¿Será necesario un sistema así hoy en día? ¿Será posible que las condiciones sociales y económicas de hoy haga necesario lo que fue condenado en los días de los apóstoles? No es mi propósito pelear contra ninguna secta en particular, sino estimularte, amigo lector, a examinar todo lo relacionado con la iglesia que Jesús edificó en contraste con el sectarismo de hoy.Desde el principio, ¿quiso el Señor que su obra fuera llevado a cabo por medio de sectas? Si el Señor pudiera hacer las cosas a su manera, ¿haría su obra por medio de sectas divididas? Y, si me permite, como el sectarismo eterniza la división y las contiendas, ¿cómo puede el Señor obrar por un sistema así? La justificación del sectarismo es para que cada uno pueda unirse a la iglesia de sus preferencias, para que cada uno se sienta satisfecho. No es asunto de complacer al Señor sino complacer al creyente. El capricho personal expresado en doctrinas particulares y el congeniarse con cada uno a su manera parece ser lo único que contribuye el sectarismo al mundo religioso. Y el mundo está pagando un precio muy caro por ese capricho.
LA UNIDAD ES MEJOR QUE EL SECTARISMO
¿Qué será lo que el mundo religioso necesita más que la unidad que existe entre el Padre y el Hijo? Jesús oró por todos los que creen en él por medio de la enseñanza apostólica, "para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste. La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno. Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad..." (Juan 17:20-23). ¿Qué contribuye el sectarismo al cumplimiento de esta oración? ¿Necesitamos más sectas para que esta oración sea una realidad? ¿Por qué tenemos cientos de sectas hoy día? Existen porque la gente no pudieron ponerse de acuerdo en las expresiones de sus posiciones doctrinales, y porque no pudieron ponerse de acuerdo en cómo adorar ni en cómo llevar a cabo la obra misionera.Cada secta en la tierra tuvo su nacimiento en una contienda y división. De no haber la contienda, de haber un acuerdo, nunca habría necesidad de empezar una nueva secta. Mientras los hombres sigan defendiendo y edificando estos productos de la contienda y la división, así perdurará la contienda y la división en medio nuestro. Y así perdurará la petición del Señor sin cumplirse. En vez de necesitar el sectarismo para que haya unidad, necesitamos desecharlo para que haya la unidad por la cual el Señor oró. El hecho de que el Señor oró para que sus seguidores fueran uno, como él y el Padre son uno, esto prueba que nunca era su intención que su obra fuera llevada a cabo por medio de sectas. ¿Por qué ser parte de un sistema que obstaculiza el cumplimiento de la oración del Señor y obstaculiza la necesidad primordial del mundo religioso, que es la unidad?
NECESITAMOS EL EVANGELISMO NUEVOTESTAMENTARIO
¿Puedes pensar en algo que el mundo necesita más que evangelismo? ¿No crees que necesitamos mucho del evangelismo como aparece en el Nuevo Testamento? Estoy seguro que todo lector estaría de acuerdo. ¿Qué contribuye el sectarismo a esta gran necesidad? ¿Estamos más preparados para evangelizar el mundo hoy día gracias a las cientos de sectas? ¿O estaríamos mejor preparados si todos los creyentes fueran unidos un una sola institución, la iglesia que Jesús edificó? Creo que todos están de acuerdo en que el sectarismo no es ninguna ventaja. Le voy a dar dos razones de por qué no nos ayuda. Primero, porque mantener la maquinaria sectaria cuesta mucho tiempo, dinero y esfuerzo, los cuales se hubieran gastado evangelizando el mundo. Hasta los líderes de la sectas más grandes se quejan de que demasiada organización y salario se está gastando en secretarios y cosas que se hubieran gastado en el campo misionero. Los gastos de operación de tantas sectas pequeñas se hubieran dirigido al campo misionero. De esta manera el sectarismo atrasa el evangelismo.
EL SECTARISMO CAUSA INCREDULIDAD
En segundo lugar, el sectarismo no ayuda en nada para evangelizar el mundo porque promueve la incredulidad al evangelio en los corazones de aquellos que quisiéramos evangelizar. Jesús oró que todos su seguidores fueran uno, "para que el mundo crea que tú me enviaste" (Juan 17:21).
El sectarismo nunca podría evangelizar el mundo, si Jesucristo tiene la razón. Según su enseñanza, si los creyentes son uno, el mundo creería que Dios lo envió; pero si los creyentes son divididos, el mundo no creería que Dios lo envió. El sectarismo consiste en multiplicar y eternizar las divisiones de los creyentes, y por eso, nunca puede convencer el mundo de que Dios envió su Hijo para salvar el mundo de pecado. Repito: el sectarismo no contribuye nada al evangelismo del mundo, sino que lo imposibilita. ¿Te conviene ser parte de algo que imposibilita la evangelización del mundo?
LAS SECTAS NO HACEN FALTA
Consideremos esta pregunta: ¿podemos tener comunión y culto sin pertenecer a ninguna secta? Afirmativo. Los discípulos primitivos tenía comunión y las sectas no existían. No sólo adoraron y compartieron, sino que también gozaron de la unidad por la cual Jesús oró. Además evangelizaron al mundo. Estas son las cosas que el mundo necesita hoy día y no puede tener por culpa del sectarismo.Ahora, ¿no podemos hacer lo que ellos hicieron? Creyeron en el Señor y obedecieron al evangelio. Fueron instruidos a bautizarse para perdón de los pecados (Hechos 2:38). Cuando obedecieron esto, el grupo de los creyentes constituyeron la iglesia del Señor en dicha comunidad. Se reunieron para culto y comunión y predicaron la palabra por todas partes. Si la gente hoy día hace lo mismo que ellos hicieron, ¿no serán también lo que ellos eran? Si todo miembro de cada secta que hay en el mundo obedeciera el evangelio según Hechos 2:38, si rehusaran unirse a ninguna secta, y si grupos de tales personas se reunieron para adorar y evangelizar, ¿qué sería de todas estas sectas? Cuando la gente hicieron esto bajo la dirección de los apóstoles, no existían secta y no existiría hoy tampoco si la gente se limitara a hacer solamente lo que dice la Biblia. Las sectas llegaron a existir cuando la personas hicieron más de lo que el Señor mandó, o cuando hicieron menos de lo que el Señor mandó. Las iglesias de Cristo resultan cuando hacemos exactamente lo que manda el Señor. ¿Necesitamos las sectas? No. No hacen falta para adorar a Dios Hace la unidad imposible. Hace imposible la evangelización del mundo. Estas razones debieran de ser suficientes para que todos se apartaran de ellos.
QUE DIOS LE BENDIGA EN ARMONIA,
SON LOS DESEOS DE TODOS LOS MIEMBROS DE LA IGLESIA DE CRISTO
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