Cortesia de la Iglesia de Cristo-Pedregal Panamá
Autores Extranjeros
El Ministerio de la Restauración
por Luis Medina
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Es común oír en las congregaciones lo siguiente: "Si todos los que han sido bautizados permanecieran fieles, no cabríamos en este lugar".. Este comentario hace que surjan en mi mente ciertas preguntas.

¿Por que se retiran los miembros? y
¿ Que esta haciendo la iglesia para restaurarlos?
En la parábola del sembrador, nuestro Señor Jesucristo estableció que no todas las personas a quienes se les predica el Evangelio iban a responder de la misma manera:

"Cuando alguno oye la palabra del reino y no la entiende, viene el malo, y arrebata lo que fue sembrado en el corazón. Este es el que fue sembrado en el camino. Y el que fue sembrado en pedregales, este es el que oye la palabra, y al momento la recibe con gozo; pero no tiene raíz en si, sino que es de corta duración, pues al venir la aflicción o la persecución, por causa de la palabra, luego tropieza. El que fue sembrado entre espinos, este es el que oye la palabra, pero el afán de este siglo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa"
Mateo 13:19-22
Hay personas que están muy aferradas a las cosas materiales de este mundo y aunque llegan a entender el Evangelio de Jesucristo y son bautizados para perdón de pecados, su interés por las cosas materiales es mayor, y finalmente terminan abandonando la fe cristiana.
Otra de las razones es por falta de crecimiento espiritual. Es lamentable ver como en muchos de los casos las iglesias están muy interesadas en convertir almas, y una vez convertidas se les abandona, no proveyendo la instrucción cristiana apropiada para su crecimiento. El apóstol Pedro exhorta a los cristianos de la siguiente manera:"Desead como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación" (1Pedro 2:2).

El Señor Jesucristo a través del Espíritu Santo, ha provisto la iglesia de hombres capaces para edificar espiritualmente a cada cristiano (Efesios 4:11-16).
El crecimiento espiritual contribuirá que cada miembro permanezca fiel (2Pedro 1:5-11).
Cuando la iglesia no pone interés en el crecimiento espiritual de los miembros, estos llegan a sentir que el asistir a las reuniones no les edifica, no les motiva a seguir en el cristianismo y Satanás empieza a obrar en ellos hasta que finalmente los aleja de la comunión cristiana, perdiendo todas las bendiciones espirituales en Cristo.

Cuando los miembros se alejan de la iglesia, unos se van al mundo, otros se unen a algún grupo religioso, y aun otros, sin entregarse a los placeres del mundo, se hacen indiferentes a la palabra de Dios.

¿Qué podemos hacer para Restaurar al Hermano?

1. Antes de juzgar al hermano, debemos reconocer donde fallamos como iglesia. A veces somos indiferentes a las necesidades del hermano, o la iglesia carece de hermanos aptos para enseñar o predicar. Y en la mayoría de los casos, la iglesia no involucra a los miembros en ninguna actividad.

2. Debemos ir a buscarlos.  Jesucristo nos enseña que no debemos esperar a que ellos vengan sino que debemos de ir a ellos. "¿Que hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si se pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va tras la que sé predio, hasta encontrarla? Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozosos; y al llegar a su casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado a mi oveja que se había perdido. Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento" (Lucas 15:4-7).
La motivación para ir a buscarlos es el amor. Es amor por las almas y amor por ellos.

3. Orar fervientemente por los hermanos que necesitan ser restaurados. Algunos hermanos retirados, aunque reconocen que lo que han hecho no esta bien delante de Dios, se sienten cómodos donde están y justifican su situación criticando a la iglesia en general o algunos de sus miembros. Otros están prestos a regresar de inmediato. Cualquiera que sea el caso, la iglesia debe orar por cada hermano retirado y no desistir aunque el hermano se resista.

4. Debemos estar preparados.  La restauración de los hermanos retirados es el trabajo de toda la iglesia, por lo tanto la iglesia en general debe estar preparada para recibirlos. Haber logrado la restauración de un hermano es un triunfo sobre Satanás. Si la iglesia manifiesta un gozo genuino al tener a un hermano retirado, el hermano se sentirá bienvenido y estará contento de haber regresado a la familia de Dios.

5. Debemos ayudarles a fortalecerse en el Señor. Esto quiere decir integrarlos totalmente a las actividades de la iglesia y no olvidar que "vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo. Mas el Dios de toda gracia, que nos llamo a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca" (1Pedro 5:8-10).

QUE DIOS LE BENDIGA EN ARMONIA,
SON LOS DESEOS DE TODOS LOS MIEMBROS DE LA IGLESIA DE CRISTO