Duele
amar a alguien y no ser correspondidos. Pero lo que es más doloroso es amar a
alguien y nunca encontrar el valor para decirle a esa persona lo que sientes.
Tal vez Dios quiere que nosotros conozcamos a unas cuantas personas equivocadas
antes de conocer a la persona correcta, para que al fin cuando la conozcamos,
sepamos ser agradecidos por ese maravilloso regalo.
Una de las cosas más tristes de la vida es cuando conoces a alguien que
significa todo y solo para darte cuenta que al final no era para ti y lo tienes
que dejar ir. Cuando la puerta de la felicidad se cierra, otra
puerta se abre, pero algunas veces miramos tanto tiempo a aquella puerta
que se cerró, que no vemos la que se ha abierto frente a nosotros. Es cierto
que no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos, pero también es cierto que
no sabemos lo que nos hemos estado perdiendo hasta que lo encontramos.
Darle a alguien todo tu amor nunca es un seguro de que te amaran de regreso,
pero no esperes que te amen de regreso; solo espera que el amor crezca en el
corazón de la otra persona, pero si no crece, se feliz por que creció en el
tuyo. Hay cosas que te encantaría oír que nunca escucharás de la persona que
te gustaría que te las dijera, pero no seas tan sorda para no oírlas de
aquella que las dice desde su corazón.
Nunca digas adiós si todavía quieres tratar. Nunca te des por vencido si
sientes que puedes seguir luchando. Nunca le digas a una persona que ya no la
amas si no puedes dejarla ir. El amor llega a aquel que espera, aunque lo hayan
decepcionado; a aquel que aun cree, aunque haya sido traicionado; a aquel que
todavía necesite amar, aunque antes haya sido lastimado, y aquel que tiene el
coraje y la fe para construir la confianza de nuevo.
El principio del amor es dejar que aquellos que conocemos sean ellos mismos, y
no tratarlos de cambiar a nuestra propia imagen, porque entonces solo amaremos
el reflejo de nosotros mismos en ellos. No te guíes por el exterior, éste te
puede engañar; no vayas por las riquezas, por que aun eso se pierde; ve por
alguien que te haga sonreír, porque toma tan solo una sonrisa para hacer que un
día obscuro brille.
Espero que encuentres a aquella persona que te haga sonreír. Hay momentos en
los que extrañas a una tanto, que quieres sacarlos de tus sueños y abrazarlos
con todas tus fuerzas. Espero que sueñes con ese alguien especial. Sueña lo
que quieras soñar; ve a donde quieras ir; se lo que quieras ser, por que tienes
tan solo una vida y una oportunidad para hacer todo lo que quieras hacer.
Espero que tengas... Suficiente felicidad para hacerte dulce, Suficientes
pruebas para hacerte fuerte, Suficiente dolor para mantenerte humano, Suficiente
esperanza para ser feliz.
Las personas más felices no siempre tienen lo mejor de todo, solo sacan lo
mejor de todo lo que encuentran en su camino. La felicidad espera por aquellos
que lloran, aquellos que han sido lastimados, aquellos que buscan, aquellos que
tratan, por que solo ellos pueden apreciar la importancia de las personas que
han tocado sus vidas.
El amor comienza con una sonrisa, crece con un beso y muere con una lagrima.
La brillantez del futuro siempre será basado en un pasado olvidado. No puedes
ir feliz por la vida hasta que dejes ir tus fracasos pasados y los dolores de tu
corazón.
Cuando naciste, tu llorabas y todos alrededor sonreían, vive tu vida de forma
que cuando mueras tu sonrías y todos alrededor lloren.