La
autora, consultora senior en Recursos
Humanos, colabora desde hace más de 20 años con empresas líderes y es socia fundadora
de la Red de Consultores DaR, que
propicia la denominada formación vivencial y
los valores humanistas en la gestión de los equipos de trabajo. Define a la formación vivencial como una
intervención de consultoría que utiliza la práctica
individual en situaciones provocadas para
potenciar aptitudes y cambios. Los seminarios se realizan según convenga
al Cliente- en out-door training o
in-company.
ØRentabilidad de la gestión y
formación orientada a los equipos de trabajo
La rentabilidad de la formación
vivencial es cuantificable de forma muy inmediata. Se orienta a objetivos a la medida de
cada organización aunque existen aspectos comunes para todas. Cada asistente conocerá mucho más su
forma de actuar y de las herramientas de cambio personal. Existen más contribuciones
tanto en el desarrollo de habilidades de liderazgo como en
la implicación de los miembros de un equipo. Todo ello garantiza la acumulación y
transmisión de un valioso capital que es el
conocimiento que va adquiriendo la organización. A mediano y largo plazo, todos se
enriquecerán y darán valor añadido a todas las actuaciones de la empresa.
¿Cómo se mide hoy el valor de una
empresa?. Existen fórmulas y también la opinión de que es un valor de oferta y demanda.
Pero lo que es evidente que las empresas que más saben, es decir que cuidan
de su capital de conocimiento, son finalmente las que sobreviven y se cotizan. Una
formación adecuada interviene activamente tanto en los resultados inmediatos como en la
valoración del conjunto.
Existe una larga historia de estudios
que demuestran que el mundo del trabajo puede
compatibilizar la alta productividad con un clima laboral de alto grado de satisfacción.
El muy discutible aumento de costes atribuido a cualquier gasto en formación, es un argumento vulgarmente utilizado cuando se
discuten presupuestos. Se trata de un desplazamiento
del eje de la discusión a un campo
erróneo ya que olvidan decir que toda renovación exige una inversión inicial, pero que
a corto y largo plazo existen ventajas cuantificables en realizar consultoría y
formación orientadas a la creación de equipos de trabajo cooperativos y que propician la autonomía y cooperación de cada
uno de sus miembros.
Paradójicamente, algunos directivos
que toman importantes decisiones para la renovación tecnológica no piensan demasiado en
la renovación humana. El viejo Taylor ha quedado atrás ningún hombre o mujer son vistos
ya como la prolongación de una máquina. Sabemos hoy que la contribución de un
trabajador es mayor cuanto más inteligente y creativo es su trabajo. También, que un
equipo es el único sitio donde cada uno puede desarrollar sus mejores aspectos, con todas
los conflictos que estos procesos ocasionan. Aprender a reconocer las propias emociones,
sus efectos sobre los otros y, reconducir en consecuencia las conductas y situaciones, son
parte de los resultados brindados por la formación vivencial.
ØVariables para la evaluación y
formación de los miembros de un equipo de alto rendimiento
La evaluación de los miembros de un
equipo es la herramienta más importante que permite la reconducción continua de la
gestión. Si cada uno y el dirigente conocen lo mejor de sí
y de los colegas, se realizará una
buena distribución de responsabilidades (formalizada o espontánea). Finalmente, como lo
saben los grandes dirigentes, la motivación, la adhesión y el compromiso son los
resortes que aseguran el éxito.
¿Qué evaluación y qué modelo de
formación son adecuados para crear y
gestionar equipos de alto rendimiento?. Se trata de contemplar los tipos de variables que
intervienen a la hora de formular proyectos formativos y que son las implícitas, como son el valor social e
individual del trabajo y las localizadas en
las necesidades concretas de una organización.
¿Existen modelos para la formación
enfocada al alto rendimiento?. Parecería que el mundo del deporte, con su popularidad y
espectacularidad, sugiere algún modelo.
Muchas otras actividades menos visibles como
son los equipos de bomberos, de rescate o de
cirugía son a la vez equipos de alto rendimiento. O, la tripulación de una
barca pesquera pequeña, enfrentada a un mar bravío o,
las tropas de los ejércitos. Todos
ellos dan evidencias sobre las conductas
grupales pero no pueden considerarse modelos exclusivos. Y
mucho menos, modelos válidos en el ámbito exclusivamente empresarial.
En el
mundo laboral existe la responsabilidad social de una comunidad que es el marco real de la productividad de los
trabajadores. La salud, el desarrollo profesional y la contribución al trabajo en el
tiempo de una vida de los integrantes de un equipo de trabajo están vinculados a los intereses de toda la
comunidad. Un trabajador que no se
desarrolla, que no aporta valor, es una importante pérdida
y un candidato firme al paro de larga
duración y a la enfermedad. A escala individual, se le ha privado de posibilidades de realización y satisfacción
personal así como de su derecho y deber de contribución al medio.
La Sociología y la Psicología
estudian las características y conductas de los hombres en sociedad y han formulado
y verificado muchas teorías. En la historia del último siglo, los mayores centros
dedicados a estudios sobre las aptitudes y actitudes así como conductas grupales, han
sido los propios ejércitos de las dos grandes guerras mundiales. Junto a ellos, las grandes industrias bélicas,
del transporte y el espacio han dado lugar a que los centros universitarios
continúen esos trabajos. Todos estos aportes fundamentan hoy la formación enfocada a la
gestión de equipos de trabajo. Bajo esta óptica, algunos puntos de interés para el
momento en que se establecen objetivos formativos:
q la creatividad y la
iniciativa se desarrollan en mayor grado cuando la autoridad está descentralizada
q la diversidad aporta mayor capital intelectual y se la ha
comenzado a gestionar orientada a mejorar resultados
q cada persona tiene
procesos de aprendizaje diversos, con aspectos que
dan su mejor nivel de aprovechamiento si se atienden y apoyan en el grupo
q a mayores niveles de
responsabilidad compartida, mayor productividad
q de forma espontánea,
la cooperación entre colegas es una tendencia mucho más acentuada que la competencia
q la excesiva
competencia en un equipo se genera cuando la
dirección tiene objetivos personales por encima de los de la organización
q cierto grado de
competencia estimula positivamente a los miembros de un equipo no anula la cooperación
Ø
Metodología para la formación de
equipos de alto rendimiento: out-door o in-door
Todas las teorías actuales de la
gestión empresarial nacen con la vocación de mejorar la calidad de la vida de las
personas. Entre los últimos que nos hablan de ello, Peter Senge quizá el mas
activo hoy- ha creado una extensa red de intercambio con consultores de todo el mundo para
impulsar la revalorización del de las personas. En esta nueva tercera o cuarta
revolución tecnológica, el mundo está reflexionando sobre el respeto a cada vida y al
entorno. Estamos en el inicio de un nuevo modelo de productividad y de gestión de
equipos. Por ello, las metodologías pueden ser muy variadas, pero en el centro están la
experimentación personal, la participación y el compromiso. Y, redescubriendo el valor
de los juegos, el humor y la improvisación al servicio de la participación de todos. Los profesores serios y puramente teóricos están
hoy en los gabinetes de investigación.
La formación vivencial es lo opuesto
a la formación tradicional y se fundamenta en los itinerarios de aprendizaje que
iniciamos en el momento de nacer, tocando, experimentando y probando. Por ello, se puede realizar
en ámbitos cerrados o al aire libre (in-door y out-door training). Lo único importante
es que cubran sus objetivos de cohesionar al grupo, dar a cada uno información de los
aspectos más relevantes para el trabajo grupal y de los estilos de aprendizaje. Y,
también para desarrollar habilidades específicas: negociación, persuasión, mando o
bien un poco de todas ellas.
En la formación vivencial es la
metodología es flexible; la más adecuada al
momento. A través de juegos, el humor y
todas las situaciones que propician el anclaje de las personas en su infancia y su
juventud, como momentos privilegiados ambos
de máxima capacidad de aprendizaje y modelaje de conductas. El perfil del consultor es
importante: debe ser una persona madura y muy experimentada, con un amplio repertorio
personal de recursos intelectuales y emocionales.
Todo lo aquí comentado es una modesta
exposición sobre la formación vivencial para equipos de trabajo
que intenta corresponder a los paradigmas
emergentes en el mundo empresarial.
Barcelona, marzo 2002