Sandro Gallazzi
El Reino de Dios ha llegado.
En este momento, en el cual parece inútil e ilusorio soñar y luchar por un mundo sin desigualdad y lágrimas, vale la pena volver a las fuentes para saciar nuestra sed con los sueños de nuestras madres y nuestros padres en la fe y realimentar nuestra esperanza. Con este deseo, este ensayo busca descubrir la "novedad" de la buena nueva del reino de Dios, en una época llena de sueños, luchas e ilusiones. Conocer mejor el contexto cultural de la época y, especialmente, el pensamiento llamado apocalíptico, nos ayuda a ver las raíces antiguas de las propuestas de Jesús y los nuevos frutos que él produce. Podremos así descubrir la lógica que nos permite continuar soñando sin caer en la alienación y en la ilusión.