Poesia    por   Dante Amerisi
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Cerrando los ojos…


Si cierro mis ojos
casi puedo ver al niño trepar sobre una pared de ladrillos
solo para saltar desde el techo
No es una gran altura   pero la imaginación  llega más allá de las estrellas
Ahí es donde se supone que yo debía de estar…



Y si mantengo los ojos cerrados
casi escucho los pasos del adolescente
abriéndose camino entre las huellas olvidadas sobre la colina
que de pronto se ha convertido en montaña

Subiendo más alto que nunca   allá en la cima
su mirada se dispara    como una flecha en el aire:
un momento alta   un momento sobre la línea del horizonte
y finalmente aterrizando sobre un punto perdido en el suelo
Y todo esto mientras abre sus brazos en un largo y placentero viaje imaginario



Y si insisto en cerrar los ojos
casi puedo sentir como ese muchacho se sumerge
en los sueños que necesita explorar para convertirse en hombre
Ilusiones encuentra en su camino

En un espacio más profundo
encontrará  las llaves que abren puertas de futuros tiempos
Entonces es cuando él comienza la búsqueda
y una misión se establece y se abandona una y otra vez
Pero esto nunca es un retroceso
sino más bien es un subir por una escalera de accesos múltiples



Y si aún no abro mis ojos puedo ver a un hombre
atravesando la multitud de las realidades
llevando su corazón en la mano
mostrándolo a propios y extraños
sólo para descubrir que la autenticidad no es algo fácil de hallar

Y pareciera que todos escogen aparentar en lugar de ser

Y es entonces como la realidad se vuelve tan irreal
Las palabras no siempre son el sonido de la verdad
 los pensamientos ya no son la extensión de sentimientos
y los sentimientos ya no son propios   sino prestados
Pero mientras tanto   entre los ecos de batallas perdidas y ganadas
aparece una luz   repentinamente vista por sus ojos en la distancia
Paulatinamente esta se vuelve más intensa
al tiempo que toma forma de mujer
Imagina que la mujer de sus sueños se encuentra ahí
en el océano del tiempo



Y eso es lo que veo si cierro mis ojos
Pero si me atrevo a abrirlos
sencillamente sé que veré a la mujer de mis sueños
justo aquí a mi lado