Los Siddhas

HAM SA

SIDDHAS

El movimiento de los siddhas representa la imagen más cabal de lo que debería ser un yogui. Su origen se pierde en el tiempo, por primera vez tenemos datos concretos de su existencia durante la época Dravica.

Luego, sus ideas resurgen durante el siglo 6 para florecer entre los siglos 9 y 12, en este periodo los siddhas eran considerados un movimiento de propuestas revolucionarias.

Estas ideas podrían sintetizarse así:

LIBERTAD

IGUALDAD

RESPETO

FRATERNIDAD

Maha Avatar Babaji

siddha yogi inmortal que vive en los Himalayas

Estas bases crearon el espacio necesario para completar la gran síntesis pan-india de los varios elementos del Vajrayana budista, del tantrismo hindú, de la magia y de la alquimia. El lema de este vasto movimiento fue el ideal de la inmortalidad en el cuerpo, "libertad, salud perfecta e inmortalidad: todo ganado en esta vida"

La designación siddha significa "acabado, perfeccionado" y se refiere al yogin que alcanzó la mente sublime en vida y de esa manera se convirtió en un maestro de todo el conocimiento gnóstico y, sobre todo, que actualizo las potencialidades latentes en el resto de los seres humanos (siddhi).

Un siddha es un alquimista espiritual que trabaja y transforma a la materia impura (el cuerpo) en oro (la esencia espiritual inmortal). Algunos investigadores desprevenidos pensaron que los siddhas enfocaban su práctica sobre el káya-sádhana o "cultivo del cuerpo", entendiéndolo como el epitome del universo y el instrumento para obtener la emancipación. Este error proviene de que probablemente no se familiarizaron profundamente con sus practicas.

Los siddhas consideran tan importante el mundo material, como el mundo mental y como el espiritual, debido a que para ellos esta división solo existe para aquel que no esta libre de la ilusión (maya)

Por lo tanto sus prácticas siempre se plantean desde un enfoque global.

Los siddhas plantean la posibilidad de alcanzar la inmortalidad mediante un procedimiento esotérico especial de revitalización del cuerpo al convertirlo en un vehículo divino. Esta última forma de inmortalidad se considera la superior, aunque un yogin pueda optar por la inmortalidad física si se siente movido a cumplir una misión especial sobre la tierra.

La transubstanciación del cuerpo intentada por los siddhas tiene posiblemente su analogía bíblica en la ascensión de Jesucristo. En la filosofía de los siddhas, la muerte no es inevitable, y la emancipación no se contempla como un acontecimiento post mortem. De hecho, júzgase que la libertad de las cadenas de la existencia condicionada sólo es alcanzable mientras se está en la carne. La muerte de los no iluminados espiritualmente que no hallaron su libertad coincide con su ocupación de un cuerpo nuevo que ha de encarnarse nuevamente en el mundo de lo efímero. Así los siddhas creen en la "liberación en vida" o Jívan-mukti como etapa preliminar antes de la emancipación final o Para-mukti después de la muerte.

El movimiento de los siddhas es un fenómeno altamente complejo con muchas subdivisiones, aunque poco entendidas. Las escuelas más importantes son las de los Náthas Siddhas y los Mahá-Isvara-Siddhas.

Los Mahá-Isvara-Siddhas

Tenían su origen en el Sur. Estaban estrechamente afiliados con los primitivos Rasa-Isvara-Siddhas del Doab o Antarvedi.

Parece que la rama sureña del movimiento siddha, aunque de acuerdo en general con el estilo de vida siddha, no obstante mostraba algunas divergencias debido a cambios de énfasis:

1. Una actitud anti-ritualista más intensa, incluso anti-sistemática, con un cabal desprecio hacia el aspecto devocional del Yoga.

2. Una actitud más bien radical con una desatención y un desprecio expresos hacia la rígida estructura social de la sociedad medieval india. La cultura siddha norteña tiene ambos elementos sólo en una forma mucho más tenue.

La tradición Tamil sureña celebra a dieciocho siddhas, algunos de los cuales eran de origen chino y cingalés, y se dice que uno procedía de Egipto. Asimismo, la cantidad de dieciocho es puramente simbólica. Entre estos renombrados yogin-magos las hazañas mágicas de Akkattiyar (Agastya) y Civavakkiyar fueron las que cautivaron la imaginación del pueblo. La investigación trae a la luz sólo muy gradualmente la sabiduría y las técnicas pertenecientes al movimiento siddha tamil. Lo mismo es también verdad respecto a la rama norteña.

NÁTHAS SIDDHAS

Los nátha-siddhas tubieron una enorme influencia en el desarrollo del Yoga. La escuela Nátha : la palabra nátha significa "Puro", "Señor" puede ser rastreada hacia el impacto inspiracional directo que el Vajrayana budista hizo sobre el mundo cultural de los hindúes.

La filosofía nátha muestra un marcado parecido con el tantrismo budista, y parece que los nátha-siddhas fueron los primeros entre los hindúes que asumieron prácticas tántricas que originalmente se desarrollaron en círculos budistas.

Sin embargo, los náthas no fueron simplemente plagiarios o copistas de los preceptores budistas. A pesar de los escasos datos disponibles sobre este movimiento, está claro que los náthas siguieron sus propios caminos y desarrollaron muchas nuevas teorías y técnicas yóguicas originales. Algunas están corporizadas en el Hathayoga, también llamado hathavidyá o la "ciencia de la fuerza", que es una continuación directa del káya-sádhana de los siddhas primitivos, también encontramos su presencia en el Kriya Yoga, Kundalini Yoga y muchos otros métodos que recibieron sus aportes.

La tradición budista norteña habla de un panteón de 84 siddhas, la mayoría referidos como siddhaacharyas.

Las fuentes tibetanas, dan un esbozo biográfico de cada uno de estos siddhas. El consenso de la opinión académica es que esta lista no tiene base histórica y que el numero 84 es meramente una expresión simbólica de perfección. Sin embargo, muchos de los nombres mencionados pertenecen a personajes históricos, puesto que algunos de sus textos y canciones místicas (dohá) se han preservado realmente, aunque la mayoría en traducciones tibetanas.

Como el primero de los Siddhas, las fuentes tibetanas mencionan a Luhi-pa (Luyi-pada) que es Matsyendranatha, el maestro del famoso Gorakshanatha. lnnumerables leyendas y canciones hablan de los logros mágicos y espirituales de estos dos grandes maestros. Otro notable siddha que merece mención fue Nagarjuna a quien los tibetanos han confundido con el fundador del sistema budista Madhyamika del mismo nombre, que vivió probablemente en el siglo 11 d.C. Nagarjuna fue el maestro del siddha Tilopa quien a su vez inició a Naropa que fue el gurú de Marpa. Marpa, a su vez, instruyó al ilustre Milarepa.

Las doctrinas nátha se remontan a Matsyendranatha, también llamado Minanatha. Ambas palabras significan lo mismo, a saber "señor de los peces". Este nombre extraño se remónta a una historia legendaria que se narra sobre él en la que se díce que era un pez, o es una indicación que vino a través del mar desde tierras desconocidas.

Aunque algunos tratados sánscritos sobre Yoga llevan el nombre de Matsyendranatha, como por ejemplo el tratado esotérico Kaula-Jñána.Nimaya, es imposible decidir en favor o en contra de la historicidad auténtica de este famoso maestro. Los hindúes ven en Matsyendra al fundador de la escuela kaula del tantrismo, que es en muchos aspectos muy similar a la sahajiya budista. En Nepal, asimismo, Matsyendra es venerado como la deidad guardiana del país en la forma del bodhisattva Avalokitesvara

El primer personaje tangible y al mismo tiempo el más ilustre de todo el movimiento nátha es Gorakshanatha, el reputado iniciador de la escuela del Hathayoga. En su mayoría, las tradiciones le consideran como discipulo directo de Matsyendra, pero no hay unanimidad perfecta en esta cuestión; se sostiéne que Goraksha es el fundador de la secta kanphátá. La palabra sánscrita significa "oreja partida" y se refiere a la costumbre de usar enormes aros. En aquellas épocas un movimiento muy difundido, la secta kanpháthá está hoy en día en un estado de degeneración. Muchos de sus miembros no siguen más las viejas prácticas y ni siquiera parecen conocer mucho acerca de sus escrituras sagradas. Originalmente, esta secta era estrictamente célibe y ascética.

El trasfondo filosófico general de este movimiento que es de tipo elevadamente sincrético, es un compuesto de muchas tendencias diversas. Los investigadores estuvieron muy confundidos al principio al Encontrar elementos del Shivaismo, del Vaisnava, del Budismo, del Shakta. Pero estos elementos lejos de indicar que los siddhas siguieran alguno de estos caminos solo nos dicen que este fue el primer movimiento ecuménico del mundo.

Sankaracharya

Difusor del Advaita Vedanta

La posición teológica de los náthas es teísta, con el Ser trascendente como el centro del que mana la creación entera. La metafísica Nátha, que nunca fue un rasgo destacado de un movimiento de orientación netamente práctica y de experimentación directa, es una versión Sakta del Advaita-Vedanta.

Sólo existe una única Realidad no-dual que para la mente no-iluminada aparece como muchos. Aunque uno solo, tiene dos aspectos que en el nivel fenomenológico aparecen como los dos polos positivo y negativo respectivamente. Éstos representan la energía estática y dinámica. En su movimiento descendente y emanante, ambos ponen en movimiento, juntos, el proceso de formación y desarrollo que termina con la manifestación del universo físico conocido por los sentidos corrientes del hombre. En su movimiento ascendente, resuelven la creación entera y conducen al yogin hacia la experiencia del estado espontáneo de la no-dualidad. Esto a menudo se llama lo "espontáneo" (Sahaja) porque es innato en todo y es la única realidad verdadera.

Efectuar esta introversión es el propósito principal de todo sádhana.

A menudo se lo menciona como ulta-sádhana o el "curso de la inversión". La posibilidad de esta introversión individual está garantizada por el hecho de que el cuerpo es una réplica o epitome exacta del universo existente entero. Siva y shakti a modo de analogía mística están ubicados en el cuerpo humano mismo. A través de su acción combinada, el yogin resuelve gradualmente su "cosmos" privado y se uno en el Uno no-dual. Esta integración es coincidente con su logro de la inmortalidad en un cuerpo perfeccionado.

En sintesis

Los siddhas se basaban en la