Oraciones para el hogar
1-. Bienvenida del año nuevo
1.1 Encendido de la velas
Con la puesta del sol de esta tarde, unidos con todos los judío de todos los lugares y tiempos, proclamamos un nuevo año de esparanza. Señor del universo, danos tu luz y tu Verdad para que nos acompañen. Estas velas que encendemos son un símbolo de tu llama eterna: que nuestros ojos se abran al bien que debemos hacer, moviéndonos a trabajar para la paz y la armonía, haciendo que el mundo brille con Tu presencia.
Barúj atá Adonay eloéinu mélej a olám asher kidshánu be mitsvotáv ve tsivánu leadlík ner shel (shabat ve shel) yom tov.
Bendito eres Tú, Señor, Dios nuestro, Rey del universo, que nos santificaste con tus preceptos y nos ordenaste encender la vela de (este shabat y de) Yom Tov.
Que el Señor nos bendiga. Que seamos fuertes para la verdad, caritativos en nuestras palabras, justos y amables en nuestros hechos. Se nos ha confiado una noble herencia; guardémosla bien.
[para un niño]
Yishmejá eloím ke efraim ve ji manasé.
Que el Señor te guarde como a Efraim y Manasés.
[para una niña]
Yisméj eloím ke Sara, Rivka, Rajel ve Lea.
Que el Señor te guarde como a Sara, rivka, Rajel ve Lea.
Yevarejeá Adonay ve yismeréja yaér Adonay panáv eléja ve yijunéja yisá Adonay panáv eléja ve yasém lejá shalóm.
Que el Eterno te bendiga y te guarde. Que el Eterno te ilumine con su presencia y te agracie. Que el Eterno se vuelva hacia tí y te conceda la paz.
1.2 Kidush
La observancia de Rosh ha shaná nos recuerda que todos nosotros estamos en juicio: el nuestro propio y el de Dios. Nos llama a bandonar nuestros antiguos errores y fallos, mirando hacia adelante con una nueva esperanza y determinación.
Alabemos a Dios con este símbolo de la alegría, y demosle gracias por el bien que hemos experimentado durante este pasado año. Que nuestra adoración durante estos días nos llene de ilusión para abrazar la vida y la santifique. Que este nuevo año nos triga fuerzas renovadas a nuestro pueblo Israel, y la paz a todo el mundo.
1.2.1 En la noche de Rosh ha Shaná
Va yehí érev va yehí boker, yom a shishí Va yejúlu a shamáyim ve a árets ve jol tsevaám. va yejál eloím ba yom a shevií melajtó asher asá, va yishbót ba yom a shevií mi kol melajtó ashér asá. va yevaréj eloím et yom a shevií va yekadésh otó ki bo shabat mi kol melajtó asher bará eloím laasót.
Y se concluyó la creación del cielo y la tierra y todo lo que contienen. habiendo concluído su obra, Dios cesó en su creación y reposó. Y bendijo Dios al día séptimo y lo santificó ya que en él concluyó su obra y su creación.
Barúj atá Adonai, eloeinu mélej a olám boré pri a gafén.
Bendito eres tu, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo, creador del fruto de la vid.
Barúj atá Adonay eloéinu mélej a olám asher bajar banu mi kol am ve romemänu mi kol lashón ve kidshanu be mitsvotáv. va titén lánu adonay eloéinu be ahavá et yom ( a shabat a ze ve et yom) a zikarón a ze, yom teruá, mikrá kódesh, zéjer litsiát mitsraím. Ki banu bajarta ve otánu kidashta mi kol a amím u devarjá emét ve kayám laad. Barúj atá adonay mélej al kol a arets mekadesh (a shabat ve) yisrael ve yom a zikarón.
Bendito eres Tú, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo, que nos escogiste de entre los pueblos, y nos exaltaste de entre las lenguas, y nos santificaste con tus preceptos. Y nos diste, Señor, Dios nuestro, con amor este día (Shabat y este día) de recordación, el día de la llamada del shofar, reunión santa, recuerdo de la salida de Egipto. Porqué nos escogiste y nos santificaste de entre todas las nacionesn y tu palabra es verdad eterna. Bendito eres Tú, Eterno, Reu de toda la tierra, que santificas a (el shabat y a) Israel y el día de recordación.
Barúj atá Adonay, eloéinu mélej a olám she ejeyánu ke kiimánu ve igianu la zmán a zé.
Bendito eres Tú, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo que nos has dado la vida, nos has sostenido, y has hecho que lleguemos a este momento.
Barúj atá Adonay, eloéinu mélej a olám, a motsí lejém min a árets.
Bendito eres Tú Eterno, Dios nuestro, Rey del universo, que haces salir el pan de la tierra.
Barúj Atá Adonay eloéinu mélej a olám boré pri a ets.
Bendito eres Tú, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo creador del fruto del árbol.
1.2.2 Kidush de la mañana de Rosh ha Shaná
Ve shamrú benéi Israel et a shabát, laasót et a shabát le dorotám brit olám. Beneí u ben benéi Israel ot í le olám, ki shéshet yamím asá Adonay et a shamáyim ve et a árets u ba yom a shevií shabát va yinafásh.
Y observarán los hijos de Israel el Shabat a través de los tiempos. Será entre mí y los hijos de Israel una alianza eterna, testimonio de la creación del mundo en seis días. Mas en el séptimo día dulminó su obra y descansó.
U ve yom simjatjém u ve moadeijém u ve rsahéi jodsheijém u tekatém ba jatsotsrót... ve ayú lejém le zikarón lifnéi eloeijém; aní Adonay eloeijém
Y en el día de vuestra alegría, en las fiestas y en los novilunios, haréis sonar las trompetas... como recuerdo ante vuestro Dios; Yo soy el Eterno, vuestro Dios.
Tikú ba jódesh shofár, ba kése le yom jagénu. ki jok le israel ú mishpát le eloéi yaakóv.
Haced sonar el shofar cuando aparezca la luna nueva, en el cambio de año, a la vuelta de nuestra solemne celebración. Ya que esto es un precepto que obliga a Israel, una orden del Dios de Jacob.
Barúj atá Adonai, eloeinu mélej a olám boré pri a gafén.
Bendito eres tu, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo, creador del fruto de la vid.
Barúj atá Adonay, eloéinu mélej a olám, a motsí lejém min a árets.
Bendito eres Tú Eterno, Dios nuestro, Rey del universo, que haces salir el pan de la tierra.
1.3 Acción de gracias de después de las comidas de Rosh ha Shaná
Shir a maalót
Tel. 126 Shir a maalót be shuv Adonay et shivát tsion ayínu ke jolmím. az yimalé sejón pínu u le shonénu rína, az yomrú ba goyím igdíl Adonay laasót im ele. Igdíl Adonay laasót imánu jayínu semejím. Shúva Adonay et sheviténu ka afikím ba négev. a zorím be dimá be rína yiktsorú. alój yélej u ba co nosé méshej a zará, bo yabó be rína nosé alumotáv.
Sl.126 Cuando el Eterno hizo volver a los cautivos de Sión, nos pareció un sueño. Por ellos se llenó de risa nuestra boca, nuestra lengua pronunció canciones. Entonces proclamaron entre naciones: Dios hizo grandes cosas por ellos. Dios hizo grandes cosas por nosotros, profundo es nuestro regocijo. Restaura, Eterno, nuestro pueblo como los arroyos que reviven el desierto. Los que siembran con lágrimas, con canciones cosecharán. Van llorando los sembradores, mas retornan con cánticos los que traen sus gavillas.
- Rabotai nebaréj
- Yeí shem Adonay mebaréj me atá ve ad olám.
- Bi reshút maranán ve ravanán ve rabotái nevaréj (eloéinu) she ajálnu mi sheló.
- Barúj (eloéinu) she ajálnu mi sheló u be tuvó jayínu.
- Barúj ú u barúj shemó.
Oficiante Amigos, debemos dar gracias a Dios.
Comensales Sea el nombre de Dios bendecido desde ahora hasta la eternidad.
Oficiante Con vuestro permiso bendeciremos (a Dios) pues a El debemos nuestro alimento.
Comensales Bendito sea Dios, porque sus alimentos hemos comido y gracias a su bondad vivimos.
Todos Bendito sea Él y bendito sea su nombre.
1 Barúj atá Adonay, eloéinu mélej a olám a zan et a olám kuló be tuvó be jen be jésed u be rajamím ú notén léjem le jol basár, ki le olám jasdó. u be tuvó a gadól tamíd lo jasár lánu ve al yejsár lánu mazón le olám va ed. ba avúr shemó a gadól ki ú el zan u mefarnés la kol u metív la kol u mejín mazón le jol briotáv ashér bará. Barúj atá Adonay a zan et a kol.
1 Bendito eres Tú, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo que alimentas a todo el mundo con tu riqueza, tu simpatía, tu amor y bondad. Pues Dios da pan a todo ser viviente -su amor es universal-. Gracias a su bondad nunca nos faltó comida y jamás nos habrá de faltar, ya que inmenso es su poder. Él alimenta, sustenta y agracia a todo ser, creó alimento para todas sus criaturas. Bendito eres Tú, Eterno, que alimentas a todo ser.
2 Nodé lejá Adonay eloéinu al she injalta la avotéinu érets jemdá tová u rejavá, ve al she otsetánu Adonay eloéinu me érets mitsráim u feditánu mi beit avadím, ve al britéja she jatamtá bi besarénu, ve al toratéja she limadtánu ve al jukéja she odatánu, ve al jayím jen ve jésed she jonantánu, ve al ajilát mazón she atá zan u mefarnés otánu tamíd be jol yom u be jol et u be jol shaá.
2 A ti te agradecemos, Eterno, nuestro Dios, por la tierra que otorgaste a nuestros antepasados, tierra bella, rica y extensa. También te agradecemos Eterno, Dios nuestro, por habernos liberado de Egipto, redimiéndonos de la esclavitud por el pacto cuya señal está sellada en nuestro cuerpo, por las enseñanzas de tu Ley, por la leyes, por la vida, por el amor y la bondad que nos has otorgado. Por todo ello y por el alimento que consumimos y del que Tú siempre nos provees de nuevo cada día y cada hora.
Ve al a kol Adonay Eloeínu anájnu modím laj u mebarjím otáj yitbaráj shimjá be fi kol jay tamíd le olám va ed. ka katúv ve ajálta ve savatá u berajtá et Adonay eloeíja al a árets a tová ashér natán laj. Barúj atá Adonay al a árets ve al a mazón.
Por todo ello, Eterno, Dios nuestro, te agradecemos y te bendecimos. Bendito sea Tu nombre en la boca de todo ser viviente por toda la eternidad, tal como está escrito: "Cuando comás y estés satisfecho habrás de bendecir al Eterno, tu Dios, por la hermosa tierra que te dió." Bendito eres Tú, Eterno, por la tierra y el alimento que recibimos.
3 Rajém Adonay eloéinu al Israel améja ve al Yerushaláyim iréja ve al Tsión mishkán kevodéja ve al maljút bet Davíd meshijéja ve al a bait a gadól ve a kadósh she nikrá shimjá aláv. eloéinu avínu reénu zunénu parnesénu ve jalklénu ve arvijénu ve arvá lánu Adonay eloéinu meerá mi kol tsaroténu. Ve na al tatsrijénu Adonay eloéinu lo li dei matnát basár va dam ve lo li dei a levaatám, ki im le yadjá a meleá a petujá a kedushá ve a rejavá, she lo nebósh ve lo nikalém le olám va ed.
3 Adonay, Dios nuestro, apiádate de tu pueblo Israel, de tu ciudad Jerusalén, de Sión, morada de tu presencia, del reino de David, tu ungido, del santuario construido en homenaje a tu nombre. Dios nuestro, padre y guía, danos alimentos y sostén, ayúdanos a superar nuestros sufrimientos y dificultades
Adonay, Dios nuestro, haz que nunca debamos depender de la caridad o los préstamos de otros hombres, sólo de tu bondad y generosidad. Haz que nunca suframos vergüenza y humillación.
Retsé ve a jalitsénu Adonay eloéinu be mitsvotéja u be mitsvát yom a shevií a shabat a gadólve a kadósh a ze. ki yo ze gadól ve kadósh ú lefanéja lishbát bo ve lanúaj bo be ahavá ke mitsvát retsonjá. u bi retsonjá a níaj lánu Adonay eloéinu she lo teé tsará ve yagón ve ahavá be yom menujaténu. ve a reénu Adonay eloéinu be nejmát tsión iréja u be binyán Yerushalayim ir kodshéja ki atá ú baal a yeshuót u be al a nejamót.
Adonay, Dios nuestro, sea tu voluntad, que tus mandamientos nos fortalezcan y en especial el madamiento del Shabat, este día sagrado. Pues así es un día sagrado para tí, así es para nosotros -tal como lo prescribiste- un día de descanso de reposo y de amor. Sea tu voluntad, Eterno, Dios nuestro, liberarnos de toda angustia, tristeza y preocupación en nuestro día de descanso. Sea tu voluntad que alcancemos a presenciar el consuelo de Sión y la reconstrucción de la ciudad de Jerusalén, pues Tú eres la fuente del consuelo y la salvación.
Uvné Yerushaláyim ir a kódesh bi meerá be yaméinu. barúj atá Adonay boné be rajamáv Yerushaláyim. Amén.
Reconstruye Jerusalén, nuestra ciudad santa, pronto en nuestros días. Bendito eres tú, Eterno, misericordioso reconstructor de Jerusalén.
4 Barúj atá Adonay, eloéinu mélej a olám, a el avínu malkénu adirénu borénu goalénu yotserénu kedoshénu kedósh yaakóv, roénu roé Israel a mélej a tov ve a metív la kol she be jol yom va yom ú etív ú metív ú yetív lánu. ú gemalánu ú gomlénu ú yigmelénu laad le jen le jésed u le rajamím u le reváj a tsalá ve a tselajá berajá vi yeshuá nejamá parnasá ve jalkalá ve rajamím ve jayím ve shalóm ve jol tov u mi kol tov le olám al yejasrénu.
4 Bendito eres tú, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo, Dios nuestro, padre nuestro, rey poderoso, creador nuestro y redentor, fuente de santidad, que santifica al pueblo de Israel; pastor de nuestro pueblo, rey generoso que da bondad a todos los seres. Siempre nos ha hecho, hace y nos hará el bien.
A rajamán ú yimlój aléinu le olám va ed.
El que es piadoso reine sobre nosotros por toda la eternidad.
A rajamán ú yitbaráj ba shamáyim u ba árets.
El que es piadoso sea bendecido en el cielo y en la tierra.
A rajamán ú yishtabáj le dor dorím ve yitpaár bánu le nétsaj netsajím ve yitadár bánu la ad u le olmeí olamím.
El que es piadoso sea alabado por todas la generaciones, glorificado y exaltado por medio de nuestro ser.
A rajaman ú yefarnesénu be kavód.
El que es piadoso permita ganarnos la vida con dignidad.
A rajamán ú yishláj lanu berajá merubá ba bayit a ze ve al shulján ze she ajálnu aláv.
El que es piadoso derrame sus bendiciones sobre esta casa y sobre esta mesa en la cual hemos comido.
A rajaman ú yishláj lánu et eliáju a naví zajúr la tov ve yibasér lánu be sorót tovót yeshuót ve nejamót.
El que es piadoso envie a nosotros a Eliaju, el profeta, siempre recordado y esperado, con su mensaje de consuleo y liberación.
A rajaman ú yebaréj et medinát Israel reshít tsemiját geulaténu.
El que es piadoso derrame sus bendiciones sobre el estado de Israel, comienzo de nuestro renacimiento y redención.
A rajaman ú yevaréj et baal a bayit a ze ve et baalát a bayit a ze otám ve et beitám ve et zarám ve et kol ashér laém. otánu ve et kol asher lánu kemó she nitbarjú avotéinu Abraham Yitsják ve Yaakov ba kol mo kol kol, ken yebaréj otánu kulánu yájad bi brajá shelemá, ve nomár Amén.
El que es piadoso bendiga a los dueños de esta casa, a nuestra familia y a nuestros hijos y a todos los que están aquí reunidos. Bendícenos a todos nosotros y a todo lo nuestro, tal como fueron bendecidos nuestros antepasados Abraham, Isaac y Jacob "en todo, por todo, de todo", así también, seamos bendecidos plenamente. Amén.
Ba maróm yelamdú aleijém ve aleínu zejút she teé le mishméret shalóm ve nisá berajá meet Adonay u tsedáka me eloéi yishénu. ve nimtsá jen ve séjel tov be einéi eloím ve adám.
Lleguen a las alturas nuestros méritos, sean ellos prenda de paz. Recibamos las bendiciones de Dios y sus bondades. Dios quiera que encontremos simpatía y comprensión a sus ojos y a los ojos de todos los hombres.
[en shabat
A rajamán ú yanjilénu yom she kuló shabát.
El que es misericordioso, concédenos este shabat para nuestro deleite espiritual.]
A rajamán ú yejadésh aléinu et a shaná a zot le tová ve librajá
El que es misericordioso, concédenos un año de renovado bien y bendición
A rajamán ú yezakénu limót a mashíaj u le jayéi a olám a ba.
El que es misericordioso, haznos dignos de la época mesiánica y de la vida eterna.
A rajamán ú kéren le amó yarím.
El que es misericordioso, da fuerza a tu pueblo.
A rajamán ú yishláj berajá ve a tselajá be jol maaséi yadéinu.
El que es misericordioso, bendice y haz prosperar las obras de nuestras manos.
A rajamán ú yirpaénu refuá shelemá, refuat a néfesh u refuát a guf.
El que es misericordioso, concédenos una buena salud de cuerpo y alma.
A rajamán ú yifrós aléinu sukat sheloméja
El que es misericordioso extiende sobre nosotros el refugio de tu paz.
A rajamán ú yitá torató ve ahavató be libénu ve yaír einénu bi meór torató.
El que es misericordioso, implanta tus enseñanzas y tu amor en nuestros corazones e ilumina nuestros ojos con la luz de tu Torá.
A rajamán ú yemalé mishalót libénu le tová
El que es misericordioso, cumple para el bien los deseos de nuestro corazón.
Yerú et Adonay kedosháv bi ein majsór lireáv. kefirím rashú ve raevú ve dorshéi Adonay lo yajserú jol tov. odú la adonay ki tov ki le olám jasdó. potéaj et yadéja u mashbíaj le jol jairatsón. barúj a géver ashér yivtáj ba Adonay ve ayá adonay mi betajó. naár ayíti gam zakanti ve lo raíti tsadík neezáv ve zaró mevakésh lajém Adonay oz le amó yitén Adonay yebaréj et amó ba shalóm.
Venerad a Dios, pues nada os faltará. Los poderosos se empobrecen y sufren hambre. mas los que buscan a Dios jamás nada les faltará ¡Dad gracias a Dios! Eterna es su bondad. Abre su mano al necesitado y colma a todo ser viviente. ¡Bendito es el hombre que confía en Dios! pues Dios será su protección. Fui una joven, ahora llegué a la vejez y jamás vi a un justo abandonado o a sus hijos mendigando pan. El Eterno otorgue fuerza a su pueblo. El Eterno bendiga a su pueblo con la paz.
2.1 Encendido de la velas de Yom Kipur.
Felices aquellos que se preocupan por el pobre
Dios eterno, nosotros en este momento hacemos voto de cumplir la mitsvá de la tsedaká cuando empezamos este día de santidad. No olvidamos las palabras de tu profeta, que nos llama a compartir nuestro pan con el hambriento, a vestir al desnudo, y nunca escondernos de nuestros propios parientes.
Que nosotros, juntamente con toda la casa de Israel, seamos conscientes de las necesiades de los otros, compartiendo con ellos el fruto de nuestro trabajo, ayudando a sostenerlos en cuerpo y alma. Por todo ello, que se cumpla tu promesa: "Entonces tu luz brillará como el amanecer, y tus heridas serán sanadas rapidamente; tu justicia caminará delante de ti, la gloria del Señor te seguirá."
El día más santo del año está a punto de empezar. Aprovechémoslo. Que sea para cada uno de nosotros un día de renovación. Que nos ayude a superar el mal que hay en nosotros y nos fortalezca para el bien. Que nos acerque más los unos a los otros, y que nos haga más leales para con nuestra comunidad, nuestra fe y nuestro Dios.
Barúj atá Adonay eloéinu mélej a olám asher kidshánu be mitsvotáv ve tsivánu leadlík ner shel (shabat ve shel) yom a kipurím.
Bendito eres Tú, Señor, Dios nuestro, Rey del universo, que nos santificaste con tus preceptos y nos ordenaste encender la vela de (este shabat y de) Yom Kipur.
Barúj atá Adonay, eloéinu mélej a olám she ejeyánu ke kiimánu ve igianu la zmán a zé.
Bendito eres Tú, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo que nos has dado la vida, nos has sostenido, y has hecho que lleguemos a este momento.
Que el Señor os bendiga. Que seais fuertes para la verdad, caritativos en vuestras palabras, justos y amables en vuestras acciones. Se os ha confiado una noble herencia; guardadla bien.
[para un niño]
Yishmejá eloím ke efraim ve ji manasé.
Que el Señor te guarde como a Efraim y Manasés.
[para una niña]
Yisméj eloím ke Sara, Rivka, Rajel ve Lea.
Que el Señor te guarde como a Sara, rivka, Rajel ve Lea.
Yevarejeá Adonay ve yismeréja yaér Adonay panáv eléja ve yijunéja yisá Adonay panáv eléja ve yasém lejá shalóm.
Que el Eterno te bendiga y te guarde. Que el Eterno te ilumine con su presencia y te agracie. Que el Eterno se vuelva hacia tí y te conceda la paz.
3.1 Havdalá de Rosh ha Shaná y Yom Kipur
Las secciones que figuran entre corchetes solo se recitan cuando el final de Rosh ha Shaná o Yom Kipur coinciden con la conclusión del Shabat
[ Inné el yeshuatí, evtáj ve lo efjád, ki azí ve zimrát Yah Adonay, va yehí li yeshuatí. u sheavtém máyim be sasón mi maayenéi a yeshuá. la Adonay a yeshuá, al améja birjatéja sela. Adonay tsevaót imánu, misgáv lánu eloéi yaakóv séla. Adonay Adonay oshía, a mélej yaanénu be yom karénu. La yejudím aitá ora ve símja ve sasón vikár. ken tiyé lánu. kos yeshuá esá, u be shem Adonay ekrá.
He aquí que Dios es el salvador, en Él confiaré y no temeré. Él es mi fortaleza y a Él entono canciones. Extraed agua con alegría de los manantiales de salvación. El Eterno es la salvación y la bendición de su pueblo. Dios del universo está con nosotros, hoy protege el Dios de Jacob. Los judíos tuvimos luz y alegría, regocijo y gloria. Así sea también para nosotros. La copa de salvación habré de levantar y el nombre de Dios voy a invocar. ]
Barúj atá Adonay eloeínu mélej a olám boré pri a gafén.
[Bendito eres Tú, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo, creador del fruto de la vid.
Barúj atá Adonay, eloéinu mélej a olám she a kol niyé bidvaró.] [ Barúj atá Adonay, eloeínu mélej a olám, boré minéi besamím.
Bendito eres Tú, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo, creador de cada fragancia. ]
Barúj atá Adonay, eloeínu mélej a olám, boré meoréi a esh.
Bendito eres Tú, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo, creador de las luces del fuego.
Barúj atá Adonay, eloéinu mélej a olám, a mávdil bein kódesh le jol, bein or le jóshej, bein Israel la amím, bein yom a shevií le sheshet yaméi a maasé. barúj atá Adonay, a mavdíl bein kódesh le jol.
Bendito eres Tú, Eterno, Dios nuestro, Rey del universo que distingues lo sagrado de lo profano, la luz de la oscuridad, al pueblo de Israel entre las naciones y al séptimo día del resto de la semana. Bendito eres Tú, Eterno, que distingues lo sagrado de lo profano.
A mávdil
A mávdil bein kódesh le jol jatotéinu ú yimjol zarénu ve jaspénu yarbé ka jol ve jakojavím ba láila.
El que distingue - A mavdil
El que distingue lo sagrado de lo profano perdonará nuestras transgresiones, acrecentará nuestros hijos y nuestra fortuna como la arena del mar y las estrella del cielo.