VENCIENDO A LOS CAPTORES

Porque, ¿cómo puede alguien entrar en la casa de un hombre fuerte y saquear sus bienes a menos que primero ate al hombre fuerte? Y entonces saqueará su casa. (Mateo 12:29)

Un propósito importante en la oración de poder nuestra es el “hombre fuerte” mencionado en Mateo 12:29. Jesús estaba diciendo que tu no puedes rescatar a la gente de su esclavitud de las tinieblas espirituales o influencias demoníacas a menos que tu primero venza a los captores. El poder de Satanás ya esta roto, pero el no permite que se vaya hasta que nosotros ejerzamos la autoridad que se nos ha sido delegada por nuestro Señor Jesucristo.

Cuando oramos no tratamos de persuadir a Dios para que se nos una a nosotros; oración es la actividad de unirnos a Dios en Su ministerio. Por fe ponemos todo lo que pertenece a Dios en su respectivo lugar. Aunque Satanás mantenga en su control hasta que demandemos en el nombre de Cristo, entonces el libera. A través de la oración, el poder de Cristo entonces el deja ir.

Entendiendo la naturaleza espiritual de nuestro mundo debe tener un profundo efecto en nuestra estrategia evangelista. Proclamamos las virtudes del cristianismo a los que no creen como alguien que esta fuera de los predios de una prisión proclamando a los reclusos las virtudes del mundo exterior. Pero a menos que alguien venza a los guardias de la prisión y abra los portones, ¿cómo los prisioneros podrán experimentar la libertad que estamos hablando? Debemos aprender a buscar al “hombre fuerte” antes de poder rescatar a los prisioneros.

En el nombre y la autoridad del Señor Jesucristo, yo te mando Satanás liberar a aquellos amados en mi familia quienes están ciegos a la verdad y cuyos pensamientos se levantan contra el conocimiento de Dios y que salgan del territorio enemigo.

Abraham Hidalgo