Febrero 15
UN AMOR ETERNO
"Con amor eterno te he amado;
por tanto, te he prolongado mi misericordia. (Jeremias 31:3).
Una noche llegué a
mi casa del trabajo y mi esposa me encontró en la puerta. “Es mejor que vayas a
hablar con Dennis,” me dijo seriamente. “Dennis le golpeó un pollito de Erick,
esta tarde”
Fui a donde Dennis y le pregunté directamente,” ¿Tiraste el pollito de Erick
esta tarde? Lo negó firmemente. Lamentablemente para él, había un testigo. Otra
vez lo confronté, esta vez con un aparato de plástico, que hacia mucho ruido, Dennis, dime la
verdad. ¿Empujaste a Erick?
"No." ¡Y comencé a sonar el aparato plástico! No importaba cuanto lo
amenazara, no confesaba. Estaba frustrado. Finalmente me rendí.
Un par de días mas
tarde mi esposa me esperaba en la puerta otra vez, es mejor que vayas a hablar
con Dennis, porque el pollito murió.
Encontré a Dennis
en el patio llorando por el pollito. Dennis y yo hablamos sobre la muerte y el
morir, y luego enterramos el pollito. “Dennis, creo que debemos de orar ahora,”
Le dije.
"No, Papi. Tu
oras."
"Dennis, ese pollito era de Erick. Debes de orar."
Finalmente estuvo de acuerdo. Esta fue su oración: “Querido Jesús, ayúdame a no
tirar ningún pollito. Lo que yo no podía hacer intimidándolo con un bate de
plástico, Dios lo hizo en su corazón.
¿Por que me mintió? Él pensaba que si lo admitía, yo no lo iba a amar. Estaba
dispuesto a mentir para asegurar mi amor y el respeto los cuales el temía
perder si admitía su mala conducta. Yo me acerqué y le di un abrazo a mi
pequeño niño. “Dennis, no te voy a aprobar todo lo que tu hagas, pero siempre
te voy a amar.”
Gracias, Padre,
por tu amor incondicional. Eres un padre grandioso.
Abraham
Hidalgo