24 de marzo de 2002
Disparates y Dislates
LOS INTERROGATIVOS INDIRECTOS
“ Estamos al filo de una nueva era, dice Lewis Munford, la edad de un mundo abierto, una época de renovación en que la liberación de una fresca energía espiritual sobre la cultura mundial puede dar rienda suelta a nuevas posibilidades”.
FISGÓN: Vamos hoy a cerrar este ciclo temático sobre las palabras interrogativas, con la explicación sobre la tilde que se les debe aplicar a los interrogativos indirectos. ¿Cuáles son éstos, Profe?
PROFE: Los interrogativos, tanto directos como indirectos, son los mismos: qué, cuál, quién, cuánto, cuándo, cómo, dónde, adónde,cuán. La diferencia entre las dos clases de interrogativos radica en el hecho de que los directos van entre signos de interrogación; además, implican una respuesta inmediata. Por el contrario, los indirectos no exigen signos de interrogación, ni suponen una respuesta inmediata, sino un anhelo de saber, de conocer algo. A ambos se les debe marcar la tilde.
FISGÓN: Pero entonces, Profe, ¿cómo se reconocen, dentro de la oración, los interrogativos indirectos, si no tienen ningún signo de interrogación, ni una señal visual que los identifique como tales?
PROFE: Sólo el mayor tono de la voz, es decir, el énfasis que se hace sobre ellos, al leerlos, permite su adecuado reconocimiento. La identificación de los interrogativos indirectos depende exclusivamente de la correcta lectura de los mismos.
FISGÓN: Ilustremos este caso por medio de ejemplos que permitan apreciar la diferencia entre los directos y los indirectos. ¿Le parece Profe?
PROFE: De acuerdo, proponedor Fisgón. Veamos:
1. Qué:
En interrogación directa ¿Qué vienes a hacer aquí?
En interrogación indirecta: No sabemos qué vendrá a hacer aquí.
2. Cuál-es:
En interrogación directa: ¿Cuáles son las causas de la violencia ?
En interrogación indirecta: Es preciso llegar a descubrir cuáles son esas causas.
3. Quién-es:
En interrogación directa: ¿Quiénes leyeron el libro?
En interrogación indirecta: Es importante que sepamos quiénes lo leyeron.
4. Cuánto-os:
En interrogación directa: ¿Cuánto dinero se invirtió durante la campaña?
En interrogación indirecta: Ojalá pudiera saber cuánto dinero se dilapidó.
5. Cuándo:
En interrogación directa: ¿Cuándo vendría?
En interrogación indirecta: No ha informado aún cuándo vendrá.
6. Cómo:
En interrogación directa: ¿Cómo obtener mejores ingresos?
En interrogación indirecta: No diremos cómo obtenerlos.
7. Dónde y adónde:
En interrogación directa: ¿Dónde estarán nuestros hijos?
En interrogación indirecta: No han informado en dónde se encuentran.
8.Cuán:
En interrogación directa: ¿Cuán afectuosa es tu pareja?
En interrogación indirecta: Me gustaría saber cuán afectuosa es tu pareja.
FISGÓN: Suficiente ilustración, Profe. Un ejemplo vale más que cientos de explicaciones teóricas. Hasta pronto.