¡TACHÁN! ¡Lo decidí! Después de meses y meses de espera, tenéis ante vuestros ojos la tercera entrega de "El Conde Ladillas". Pero, ante la avalancha de historias (muy buenas por cierto) de este género que no sabría clasificar (quizá estemos haciendo historia, ¡ojo!) mi modesta historia ha de cambiar para alcanzar esa originalidad que solo tienen los genios como David Summers o nuestra profesora de ingles, por poner dos ejemplos. Ahora "El Conde Ladillas" pasara a ser un historia al más puro estilo "Elige tu propia aventura". (El público se levanta, aplaude, manosea a la rubia de la tercera fila, tira compresas usadas...). Con lo cual, ahora VOSOTROS decidís el destino de los protagonistas "Pako" y "Carmen". Pero no os penseis que voy a darme el trabajo de escribir cuarenta variantes diferentes de la misma historia, no, sereis vosotros (más bien el primero que me mande el mail) el que decida que harán los personajes en la siguiente historia... Bueno, sin más preambulos paso a "escribir":
.... delante de nosotros teníamos... un oscuro bosque donde debía estar el hotel Meliá. Volvímos rápidamente la vista atrás, no sin antes acercarnos a un matorral para descubrir desconsolados que no era de maría, y vimos que la calle Doctor Flemming, que antes teníamos a nuestras espaldas, no era más que un desolador paisaje lleno de follaje, y eso mismo fue lo que hicimos para conso- larnos mutuamente.