Akane Tendo es la hija menor de Soun Tendo y la prometida (a la fuerza) de Ranma Saotome; Akane es una chica guapa, de ojos oscuros y pelo moreno y corto (aunque al principio lo llevaba largo hasta el accidental corte); su mayor afición son las artes marciales, donde es una experta y destacada competidora.
Por otro lado, es una auténtica calamidad en lo que se suponen las tareas típicas de la perfecta mujer japonesa: cocina de manera pésima (no sabe ni distinguir la sal del azúcar), tiene la elegancia de un dromedario al hacer gimnasia rítmica y es un desastre en la ceremonia del té. Vamos, un encanto.
La relación que mantiene con su prometido es de lo más complicada; fundamentalmente, la historia parte de que alguna de las tres hijas de Soun debe comprometerse con el hijo de su viejo amigo Genma, pero al aparecer resulta que el "hijo" es una chica. Akane no se lleva muy bien con los chicos, así que se muestra encantada de tener una nueva amiga, que además se presenta como una digna competidora en artes marciales; pero cual no será su sorpresa al encontrarse con un pervertido completamente desnudo en la bañera al ir a entrar ella (también desnuda, claro), y luego resultar que es esa chica.
Y Akane se queda como prometida, porque sus hermanas no están dispuestas a cargar con el muerto de tener un novio tan extraño y como ella odia a los hombres y él es medio chica, mejor que mejor. Naturalmente, Akane no está en absoluto de acuerdo en casarse con ese pervertido que miró su cuerpo, pero el pervertido, en forma femenina, le dice que está acostumbrado a verse desnuda a sí misma, y que está mucho mejor. Akane le estampa la mesa en la cabeza como muestra de "agradecimiento". Ambos se encontrarán otra vez desnudos (aunque como chicas ambas) en la bañera, recibiendo Ranma mujer otro sonoro bofetón.
Al día siguiente, ambos deben ir al mismo instituto y a la misma clase, pero Akane le deja bien claro que no le ronde, aunque Ranma le deja bien claro que no le gustan las marimachos como ella. En ese camino, Akane se encuentra con el doctor Tofu, el quiropráctico del barrio que siempre le ha curado las lesiones desde pequeña; Ranma se da cuenta del rubor que le sube a Akane a las mejillas al hablar con el doctor. Y poco después Akane debe enfrentarse con todos sus compañeros de instituto en una pelea habitual por ver quien sale con ella, y se debe enfrentar a Kuno como siempre, pero la aparición de Ranma cambia el sentido y son ambos chicos quienes pelean. Akane luego explica a Ranma que Kuno puso como condición para que algún chico saliera con ella que la venciera en combate, y que por eso está hasta las narices de los hombres.
Akane y Ranma van cultivando una cierta amistad, un tanto sobresaltada por las malas costumbres de Ranma (lo de llamarle "marimacho" le provoca una violenta reacción); es el caso de al acabar la pelea con Kuno, en la que Ranma recibe después una terrible paliza de Akane, que se lo lleva al doctor Tofu, donde Akane vuelve a comportarse como una tímida muchachita ante la sorpresa de Ranma. Al día siguiente, su hermana Kasumi le pide que le devuelva un libro al doctor, pero Akane se excusa diciendo que no puede, mientras Ranma le murmura que acceda, que es lo que está deseando. Ella sale llevándoselo de la trenza muy acalorada, y Ranma no entiende lo que pasa.
Poco después hallará la respuesta: Akane es consciente de que el doctor está enamorado de Kasumi, por cómo la mira, por cómo se comporta en su presencia... y ella no quiere molestar a su hermana. Tras vivir el encuentro entre el doctor y Kasumi, Akane sale velozmente hacia su casa, yendo al gimnasio para aliviarse de su dolor, pero poco puede hacer para remediarlo... hasta que Ranma aparece sacándole la lengua y le pide un asalto para liberarse de la tensión, pero Ranma le dice algo que le deja extrañada y patidifusa: "Eres linda cuando sonríes."; después Ranma lo lleva por un camino de broma, pero Akane no puede dejar de pensar si lo dice en serio y al ir a acostarse se mira sonriente en el espejo... y Ranma aparece por la ventana preguntando si los espejos le hacen sonreír; Akane le da un buen golpe de buenas noches.
Después aparece Ryoga y se enfrenta a Ranma; Akane es un preocupada espectadora de la pelea (al fin y al cabo, Ranma es su amigo), y se asusta tremendamente cuando Ryoga empieza a atacar ferozmente a Ranma mujer; sale corriendo a por agua caliente, pero tropieza; Ranma llega a cubrirla, esquiva los golpes de Ryoga y salta con ella en brazos hasta llegar al techo de un cobertizo, donde se abrazan con alivio... hasta que se dan cuenta de lo que están haciendo y comienzan a discutir. Pero Ryoga llega y hunde el cobertizo; Ranma cae cogiendo a Akane, pero ella le dice que le suelte, Ranma mujer le dice que no la coge por gusto, y Akane le suelta una sonora bofetada, y a punto de llorar le da la espalda y se aleja; Ranma sale tras ella tras haber dado una patada a Ryoga que hace que su cinturón afilado salga volando; Akane está medio sollozando y se vuelve a Ranma mujer con rabia: "¡A partir de ahora, tú y yo no nos conocemos!", le grita... y justo entonces el cinturón de Ryoga le corta su larga melena morena.
Akane queda bajo un shock, y sólo tras un tiempo reacciona (tras dar un buen golpe a Ranma y Ryoga) y vuelve a casa, donde recuerda por qué se había dejado el pelo así: de niña recordaba al doctor nervioso delante de Kasumi, y cuando su hermana le dijo que se comportara como una chica, Akane pensó que con el pelo largo quizás le recordara más a Kasumi, y decidió dejárselo crecer. Luego pide a su hermana que se lo iguale y va a ver al doctor para curarse el tobillo, acompañada de Ranma que la alcanza a mitad de camino, pero ante el doctor es incapaz de aguantar las lágrimas y cuando él la mira con cariño y le pide que le cuente que le pasa, llora a moco tendido abrazada a él.
Tras esto, Akane parece haberlo superado; Ranma le dice entonces que le queda bien el pelo corto, y Akane no se lo quiere creer, pero aún escucha las palabras de Ranma: "Sólo quiero decir que tu pelo me gusta más así. Sea cual sea mi gusto, nada cambiará."; Akane le llama y le da las gracias, pero aprovecha el despiste de Ranma para lanzarlo al canal.
Ahora el corazón de Akane está libre, y un pequeño cerdito, al que llamará P-Chan, vendrá a hacerle compañía; aunque Ranma reaccionará de una manera estúpida, puede que... ¿sintiendo celos?
Pero la simple amistad que Akane siente por Ranma se va a transformar de un plumazo en amor cuando en la pelea de patinaje sobre hielo Ranma le diga a Mikado unas simples palabras: "Akane es mi prometida. Si le pones un labio encima te mato."; Akane siente su corazón palpitando y el rubor en sus mejillas, y le pregunta con el pensamiento a Ranma si lo ha dicho en serio. Tras pasar por "El tornado del adiós", al creer que Ranma está muerto (o casi), llora sobre él, llamándole idiota, pero Ranma se levanta protestando, y cuando Akane ve en que estado está le grita que no haga más esfuerzos, y le coge la mano con suavidad y se la acaricia. Akane ya está perdida.
Akane no comprenderá la rivalidad entre Ranma y Ryoga, y siempre verá en Ryoga a un buen amigo, mucho más amable que su prometido.
Pero las cosas se ponen más a tono con la aparición de Shampoo; cuando ella besa a Ranma hombre a Akane se la llevan los demonios, y recrimina a Ranma. Luego se desahoga entrenándose en el jardín, pero aunque trata de decirse a sí misma que era un compromiso forzado y no estaban enamorados, recuerda de nuevo las palabras de Ranma a Mikado, y abraza al muñeco con el que estaba practicando como si quisiera abrazar a Ranma. Pero cuando ve que Ranma duda ante las palabras de Shampoo, se pone aún más rabiosa y le dará unos buenos golpes de cuando en cuando; y no digamos cuando va a llamar a Ranma para que se levante y ve a Shampoo durmiendo junto a él. Hay que destacar que es aquí cuando Akane empieza a sentir celos como tal; antes, cuando pilla a Ranma y Kodachi sobre el tejado de su casa, sólo se deshace de Kodachi, mientras que ahora es Ranma la principal víctima de sus golpes.
Luego Akane olvidará a Ranma por el uso que Shampoo hace de una técnica china, pero no deja de sentir lástima por no poder recordar a ese amable joven que tanto se preocupa por ella; pero cuando deja de ser un amable joven y Ranma le regala un buen racimo de insultos, ella acaba por recordarlo perfectamente.
Poco después, Akane sabrá la fobia de Ranma a los gatos y recibirá un beso de su prometido en forma de gato, algo que la hará ruborizarse hasta la coronilla; tras librarse de él e ir a ver al doctor Tofu, cuando va a salir de la consulta se encuentra con él y ambos quedan parados y con el rubor encaramado en las mejillas; y cuando Akane ve con claridad que Ranma hubiera besado a cualquiera que no hubiese sido ella, siente un tremendo desprecio, el cual se convertira en pura rabia cuando al pasar por el baño de su casa esa noche vea a Shampoo y Ranma hombre abrazados desnudos en la bañera, aunque es capazde reaccionar con cinismo.
Akane está a punto de ser la prometida de Mousse debido a que Ranma se la juega en el primer combate que tiene con él, algo que a ella no le gusta nada; no será la última vez que ella sea el premio de un combate. Sin embargo, todo el periodo en el que Ranma debe permanecer en forma femenina por las malas artes de la bisabuela Colonia será el periodo en el que más apoyo dé a Ranma, hasta el extremo de lanzarse al mar para salvarla cuando Akane no tiene ni idea de nadar; esto hace que Ranma sea más consciente de lo que Akane es capaz de hacer por él.
Akane hasta ahora ha sido una chica legal con Ranma, sin atreverse a decir con claridad lo que siente por él; pero llega el momento en el que se cansa de que Ranma juegue con ella (como cuando le hizo creer que perdía el último de los sobres de Shampoo para curarse de la maldición), y contraataca a lo fuerte en "Romeo y Julieta", cuando hace una grandísima actuacción al besar a Ranma... con cinta aislante sobre su boca; igual pasará cuando Ranma trate de asaltar el vestuario femenino y se despide de él rogando que busque ayuda para curar su mente enferma.
Por último, la aparición de Ukyo varía de nuevo la situación de Ranma y Akane, y es la primera vez que Akane se encuentra con una rival legal en su amor por Ranma, lo cual hace que Ukyo sea la única pretendiente de Ranma que Akane puede ver como una amiga.
Una situación muy curiosa se da con la aparición de Tsubasa, a la que Ranma hombre tratará de cortejar, provocando un ataque de celos de Akane, que posiblemente piense cómo es capaz de tratar de manera tan amable a una chica mientras que a ella no hace más que decirle barbaridades.
Una de las situaciones más comprometidas la vivirá con el hechizo que hace que Ranma abrace a todo quisqui que estornude, pues ella está resfriada y empieza a pensar cosas raras sobre Ranma; bueno, tan raro como que la quiere forzar. Y poco despué Akane verá cumplido uno de sus grandes sueños: ser extraordinariamente fuerte; ello es gracias a la super-soba, lo cual la hace capaz de vencer a Ranma, a Shampoo, a Happosai... y a todo el que se ponga por delante. Sin embargo, cuando Ranma trate darle el antídoto diciéndole que si no se lo toma le saldrán bigotes, ella no se lo cree y sólo ve en él celos de su fuerza. Pero la cosa resulta ser verdad y Akane llora desconsolada con sus bigotes de gato; finalmente, toma el antídoto y pide disculpas a Ranma por haber creído que estaba celoso de su fuerza. Pero Ranma se venga esa noche ganándola múltiples veces en una competición de pulsos.
Akane pasará por una extraña experiencia cuando tenga una cita con Ryoga, acordada por Shampoo y Ranma. En principio le parece increíble que Ranma haya hecho eso, pero finalmente lo acepta y sale con Ryoga, el cual está extraordinariamente emocionado. Sin embargo, más tarde se entera de que lo que Ranma va buscando es el jabón anti-agua, y se enfada muchísimo cuando Ranma discute con Ryoga diciendo que le da lo mismo que salgan juntos, que sólo quiere el jabón. Pero entonces Akane cae bajo una técnica de acupresión de Shampoo, lo cual le hace abrazar amorosamente a Ryoga, algo que más tarde no recordará.
Luego Ranma se lo echará en cara, y ella no se lo cree... hasta que Ryoga la coge en brazos y le agradece el abrazo. Ambos salen juntos, pero cuando Ryoga va a abrazarla, Akane se aparta para ver con horror que Ryoga no sabe controlar la fuerza de sus abrazos y que de haberla pillado la habría aplastado. Akane huye aterrorizada y trata de hacer entender a Ryoga que todo ha sido un error. Y al final la única solución que encuentra es intercambiarse la ropa con Ranma para que Ryoga no la descubra. Y a pesar de todo lo ocurrido, sigue sin tener idea de los sentimientos de Ryoga.
Uno de los momentos en los que más apoyo da Akane a Ranma es cuando éste se ve debilitado por la energibustión de Happosai. Akane tratará de ayudarle en lo posible, buscando primero el esquema de la cura y después en el entrenamiento del Rayo del Dragón, en la cual descubrirá cosas insospechadas de su prometido (como que a los siete años aún se hacía pis en la cama). Pero la reacción de Ranma a sus intentos de ayuda le duele mucho: "Viniste a entrometerte. Siempre te entrometes.". Akane es incapaz de aguantar el llanto, y le dice que sólo trata de ayudarle, pero que si le molesta se va. Sale corriendo, pero Ranma la consigue coger y le dice algo: "No soporto que tú precisamente me veas tan débil y patético.".
Akane, de todas maneras, reacciona diciéndole que era igual de patético cuando era fuerte, pero la aparición de Ryoga, creyendo que Ranma ha violado a Akane, corta la escena. Además, Ranma lo adereza con más teatro, y Ryoga se enfurece de tal manera que casi mata a Ranma. Y Akane sufre muchísimo.
Finalmente, regresan para pelear contra Happosai. En mitad de la batalla en el Furinkan, Akane ve como al viejo se le cae el esquema de la cura, y se lanza a recuperarlo. Pero Ranma lanza entonces el Rayo del Dragón y Akane queda atrapada en el remolino. Sólo busca darle el esquema a Ranma antes de desvanecerse, y lo consigue a duras penas. Tras el desmayo, se despierta cuando todo ya ha pasado, pero sólo para ver como en el esquema falta el pedazo que indica la cura de Ranma. Tras la marcha de éste, ella le sigue con el firme propósito de acompañarle donde vaya, y trata de convencerle para que se quede diciendo que aparte de la fuerza tiene otras cualidades. Pero Ranma le pregunta cuales y le pone en un brete, pues es incapaz de encontrar ninguna. Pero entonces llega Colonia y cura a Ranma. Akane va a abrazarlo de alegría, pero él le deja con el abrazo a mitad y sale corriendo para destrozarlo todo a su paso. Y Akane sintiendo vergüenza ajena.
Esta escena dice bastante de lo que Akane siente por Ranma. Se decide a acompañarlo allá donde vaya, a pesar de que ni ella misma es capaz de encontrale nada bueno a este chico, excepto que está loca por él.
Akane será sempiterna compañera de Ranma en sus siguientes aventuras, como la que tiene con Maomorin, pero llega el momento en el que adquiere protagonismo debido a su ansia por aprender a nadar; así es como sufrirá en entrenamiento del director del Furinkan, el cual la hace víctima de un sinnúmero de curiosos métodos con el fin de que se convierta en la nadadora que siempre ha soñado. Pero el fracaso es estrepitoso: ni con flotador es capaz de conseguir nadar.
Más tarde, Akane descubrirá un extraño dibujo en la barriga de P-Chan, que curiosamente también está en el vientre de Ryoga. Akane empieza a relacionar los hechos, llegando incluso a pensar que Ryoga y P-Chan sean la misma persona; pero diversas razones y el buen hacer de Ranma le llevan a desechar la absurda idea (aunque el pobre P-Chan lo pasa muy mal cuando casi le rocía con agua caliente).
Posteriormente será interesada seguidora de la cita entre Kuno y Ranma mujer, llegando a constatar hasta dónde puede llegar Ranma por conseguir su cura y creyendo en muchos momentos que ella le importa bastante menos que esa ansiada cura. Y posteriormente tendrá que enfrentarse a la situación que provoca King en el dojo; lo que peor llevará será que Ukyo y Ranma duerman bajo el mismo techo, sobre todo sabiendo que Ukyo no va a dejar de intentar conseguir a Ranma y que éste es muy amigo de ella; y de ahí la escena en la que se pone en ridículo ante ambos al escuchar tras la puerta palabras que le hicieron creer una situación muy distinta a la real; en esta aventura colaborará activamente en el entrenamiento de Ranma y sufrirá mucho con la promesa que él le hace a Ukyo.
Y tras esto tendrá que ayudar también activamente a Ranma en la aventura del Bigote de Dragón, donde le hará a su prometido una curiosa trenza hacia arriba, demostrando de nuevo lo patosa que llega a ser esta chica. Un momento interesante de la relación llega cuando participan en la carrera de los baños termales; Akane trata de invitar a Ranma, pero por un malentendido, acaba con Mousse, mientras que Ranma acaba con Shampoo. El inicio de la carrera resulta accidentado debido a la pelea que se desarrolla entre las otras dos novias participantes (Shampoo y Ukyo), mientras que Akane, que mira el asunto con bastante pena al ver que Ranma no va a poder ganar en ese plan, se deja arrastrar por Mousse.
Sin embargo, acaba con Ranma, que lejos de desearla como compañera por ser ella, la prefiere por ser "una chica fuerte y hormonada"; esto revienta a Akane, que decide continuar con Ryoga, aunque por poco tiempo. En la entrada en las arenas movedizas vuelven a unirse, y Ranma está a punto de renunciar a la carrera por salvar a Akane, atrapada en medio de la arena. Esto le da unas fuerzas tremendas a la chica, que consigue salir, rescatar a Ranma y continuar. El reencuentro con Shampoo provoca que formen un extraño trío en el que ambas, por una vez de acuerdo en su vida, exigen a Ranma una elección. Cuando Ranma elige a Akane, ésta está a punto de desmayarse de la impresión, aunque luego descubrirá que el motivo de Ranma para elegirla era otro. Finalmente, partirán juntos hacia la meta, aunque no llegarán a ser los ganadores.
Akane será un apoyo constante de Ranma chica durante el entrenamiento de combate gastronómico, donde de nuevo demuestra su apoyo sin límites a su prometido en los momentos difíciles. Pero el momento más crucial llega cuando le cede el noviazgo de Ranma a Nabiki; debido a una serie de circunstancias, Akane se enfada con Nabiki (algo poco normal) y con Ranma (algo más que habitual), y en un momento de peligro, Ranma salva a Nabiki antes que a Akane, ya que Nabiki es más débil; esto duele a Akane, que llena de rabia le dice que si quiere ser su novio, puede hacerlo. Y sorprendentemente, Nabiki acepta.
Akane trata de aparentar indiferencia, pero la curiosidad y los celos le pueden cuando Nabiki empieza a enfrentarse al resto de prometidas. Pero lo sorprendente llega cuando al ir a hablar con su hermana a su habitación, escucha cómo ella le confiesa a Ranma su amor desde hace tiempo; la confesión del secreto le afecta mucho, pero está más a la espera de ver la reacción de Ranma. Y cuando ve que Ranma se comporta como un perrito faldero con su hermana, mientras que a ella siempre le está haciendo la puñeta, se enfurece descomunalmente. Y la posterior retahila de insultos clásicos de Ranma cuando los castigan a ambos, ya le deja plenamente tocada.
Esa tarde, Akane no se encuentra con ánimos de volver a casa y enfrentarse a su nueva realidad. Pero se encuentra con Nabiki y tiene una conversación, en la cual su hermana le dice que sólo lo quiere para hacer negocio y ella admite que lo quiere, pero por eso es incapaz de decírselo o "comprárselo" a Nabiki (es la primera vez que Akane dice lo que siente por Ranma de una forma clara). Esa noche, a la llegada a casa de Ranma y durante la cena aguanta como puede los terroríficos celos, y ya en su cuarto admite que debe olvidarse de Ranma, pero un nuevo montaje de su hermana le hace flaquear.
Akane comprende que ya no tiene sentido seguir con la comedia y que debe reconciliarse con Ranma; pero él se le adelanta; Akane se sorprende agradablemente hasta que descubre que Ranma sólo quiere una reconciliación por comodidad, no por sentimientos, lo cual la enfurece muchísimo. Más tarde es testigo oculto de la actuacción de Nabiki ante Ranma en la que le pide un beso como prueba de que quiere seguir la relación; y Akane arde de celos, claro; pero finalmente, cuando Ranma huye asustado, siente más pena que otra cosa por él. Sin embargo, cuando Ranma viene a pedir disculpas (de una manera muy extraña, eso sí), Akane le aprieta demasiado las tuercas y la reconciliación se hace casi imposible.
Pero esa noche Nabiki le anuncia que Ranma quiere quedar con ella en el parque; "Una reconciliación.", supone ella, y acude muy ilusionada. Pero Ranma se retrasa; y luego le parece escucharlo en una voz a la carrera; siguiendo esa voz, se mete en un laberinto de setos, donde no consigue encontrar a nadie. Mientras piensa si debe irse o no, alguien pasa corriendo, y al levantar la vista para mirar, unos brazos salen de los setos y la capturan con fuerza. Akane sabe que es Ranma por los gritos de Nabiki, y se enfurece notablemente mientras su novio la arrastra, pero cuando llega al otro lado, Ranma la abraza y le dice "Te quiero", se queda de piedra. Akane comprende que todo ha sido un error, pero tras la marcha de Nabiki le propone que salgan para reconciliarse, y el chico acepta un tanto extrañado por el dulce comportamiento de Akane. Los celos de Akane seguirán siendo manifiestos, incluso cuando Ranma haga algo tan inocente como salir con el dibujo del panda maldito una noche.
Queda nombrar ahora los pretendiente de Akane; Ranma es el prometido oficial; Ryoga es el que peor lleva el hecho de querer a Akane y ser incapaz de decírselo, y ella no se da ni cuenta de lo que él siente; Kuno es como es, y la quiere a ella y a su "diosa de la trenza"; y el extraño Gosunkugi ha estado a punto de ganarse más de un puñetazo de ella por disfrazarse tratando de imitarla.
Así, podemos resumir como sigue la relación de Akane con el resto de personajes:
Amor por Ranma, aunque sus continuos varapalos la ponen a parir.
Amor fraternal por Kasumi, Nabiki, Soun y Genma.
Amistad con Ryoga y Ukyo.
Asco por Kuno (como no).
Odio rabioso para con Shampoo.
Muy fuerte rivalidad con Kodachi (sobre todo, por lo poco deportiva que es).
Mucho cariño por P-Chan (si se enterase de quien es...)
Respeto por la bisabuela Colonia.
Simpatía por Mousse.
Amistad cariñosa por el doctor Tofu.
Desconfianza y respeto por Happosai.
Indiferencia por Gosunkugi.
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