Ranma Saotome es el personaje principal de la historia; es un chico moreno, de ojos claros y guapo, excepto cuando se moja con agua fría, momento en el que se transforma en una jovencita con su misma cara (sólo la longitud de las pestañas y la suavidad de los rasgos los distinguen) y un cuerpo de los que quitan el hipo.
El hecho de transformarse así se debe a su caída en el manantial de la chica ahogada en Jusenkyo; desde entonces, Ranma Saotome no ha vuelto a ser el mismo, pero no físicamente, sino en cuanto a su personalidad. Por un lado, ve en su parte femenina algo que pone en duda su masculinidad, algo que hace que esté tratando de volver siempre a la normalidad por cualquier medio; además, su lado femenino le ha acarreado unos cuantos disgustos graves: que Tatewaki Kuno le esté cortejando casi constantemente, el beso de Mikado Sanzenin (encima el primero), la persecución a muerte de Shampoo, la enemistad de Kodachi Kuno, la constante presión del sátiro Happosai, y muchas cosas más. Sin embargo, también sabe sacar partido de esa rara cualidad, pues su cuerpo femenino le ha servido de disfraz en muchas ocasiones y en otras tantas le ha permitido comer gratis, algo muy importante para este empedernido glotón.
Otra de las cualidades principales de Ranma es el hecho de que asegura no haber perdido jamás un combate de artes marciales, lo cual hace que se le pueda picar con facilidad; las múltiples y extrañas competiciones de artes marciales que se dan a lo largo de la historia así lo demuestran: gimnasia rítmica de artes marciales, artes marciales a domicilio, artes marciales sobre hielo, etc. Así, se ve metido en unas cuantas divertidas situaciones por ese estúpido orgullo.
Sin embargo, lo más ajetreado de la vida de este chico es su relación con las chicas. Por un lado, está prometido a Akane; y su historia para con ella tiene mucha tela.
Ranma conoce a Akane al llegar a casa de los Tendo, pero la conoce estando en forma femenina, por lo que Akane, a la que no le caen muy bien los chicos, la recibe con los brazos abiertos (como si fuera una amiga, vamos); pero su encuentro en el baño, donde ambos se encuentran desnudos cara a cara, cambia la situación; encima Ranma pica a Akane diciendo que su cuerpo femenino es mucho mejor que el de ella, y Akane le estampa la mesa en la cabeza.
Desde entonces, Ranma empieza a pensar que Akane es una chica violenta, y que no va a tener más remedio que aguantarla hasta que se rompa el compromiso; a pesar de todo, ya que deben convivir a la fuerza, tratan de llevarse bien, algo que pasa hasta que Ranma llama "marimacho" o "chica violenta" a Akane. Ranma conoce al doctor Tofu por accidente, y se da cuenta de inmediato de lo que Akane siente por él; y tampoco tarda mucho en darse cuenta de por qué Akane tiene manía al resto de los hombres: todas las mañanas tiene que pelearse con sus compañeros porque todos quieren salir con ella. Ahí es cuando conoce a Kuno y comienza la extraña relación de rivalidad (por la parte masculina) y puro asco (por la parte femenina).
Cuando Ranma derrota a Kuno un tiempo después, el resto de chicos del Furinkan renuncia a Akane (excepto el mismo Kuno), y los compañeros de clase de Ranma comienzan a preguntarle qué cosas hace con Akane ("Eres su novio, ¿no?"); a Ranma esto le pone un tanto violento, pero empieza a fijarse en Akane mientras juega al béisbol, y la ve sonreir; algo le empieza a pasar.
De vuelta a casa ese mismo día, tras haber recibido un involuntario pelotazo de Akane, sólo va pensando una cosa: "Nunca funcionará"; sin embargo, ese mismo día Ranma se da cuenta de por lo que está pasando Akane: el doctor Tofu está enamorado de su hermana Kasumi, y ella no quiere interferir; así, tras el primer encuentro que Ranma vive entre Kasumi y el doctor, al ver cómo reacciona Akane, trata de animarla de la mejor manera que sabe: se ofrece a pelear con ella, le pregunta si no está cansada de estar siempre tan tensa y le da el toque definitivo: "Eres linda cuando sonríes."; Akane no dejará de pensar en eso lo que resta del día, pero volverá a dar un buen golpe a Ranma cuando lo vea husmeando en la ventana de su cuarto.
El momento definitivo viene tras el corte de pelo de Akane, producido por la pelea entre Ranma y Ryoga; Ranma ve cómo Akane llora abrazada al doctor y después trata de animarla, diciendo que el pelo corto le queda muy bien; Akane no se lo quiere creer, y Ranma no se lo toma muy bien, pero cuando después ella lo llama y le da las gracias, Ranma la ve a la luz del sol poniente, hermosísima ella, y el corazón se le derrite. La historia ha comenzado.
Y las cosas se empiezan a complicar por el factor celos; primero, Ryoga/P-Chan; a Ranma se le devoran el hígado los celos cuando Akane besa al cerdito, y no para de recriminarle en toda la historia que duerma con él (algo que Akane nunca entenderá); después, cuando Mikado Sanzenin trata de besar a Akane, Ranma reacciona, y se busca un combate por haber salvado a su chica de la situación, combate en el que logrará el amor de Akane gracias a su sincera advertencia a Mikado: "Akane es mi prometida. Si le pones un labio encima te mato.".
Y claro, queda la chalada de Kodachi Kuno, con la que mantiene la misma relación dual que con su hermano Tatewaki: odio por Ranma mujer y amor (aunque un tanto particular) por Ranma hombre; naturalmente, Ranma no siente ninguna gana de iniciar una relación con una chica tan... extraña (por decir algo no muy fuerte).
Pero las cosas no podían parar ahí; aparece Shampoo, tratando de matar a Ranma mujer, pero es derrotada accidentalmente por Ranma hombre, y le da un beso de los que hacen historia; Akane le dice a Ranma que nunca han estado comprometidos, y Ranma trata de explicar a Shampoo que nunca se va a casar con ella, pero las carantoñas de la hermosa muchacha china le hacen vacilar. Pero después pasa por su prueba de fuego: Akane no le recuerda debido a el uso de una técnica china por parte de Shampoo, pero él está dispuesto a todo para que ella lo recuerde; pero antes de que haga nada grave, Shampoo aparece y le promete el remedio... si mata a Ranma mujer; Ranma pide ayuda a Ryoga, al que se añaden Soun y el panda, para hacer creer a Shampoo que Ranma mujer ha muerto, pero al final consigue hacer recordar a Akane a base de insultos, y hace marchar a Shampoo haciéndole creer que es en realidad una mujer, y que Ranma hombre es la parte falsa; pero Ranma al ver a Shampoo llorar no deja de sentir pena.
Llegados a este punto, ya conocemos cual es la debilidad principal de Ranma para con las mujeres: no es capaz de verlas llorar; esto hace que las más pérfidas de sus pretendientes se aprovechen de esta circunstancia para despistarlo y conseguir sus propósitos.
La relación de Ranma con Akane sigue avanzando a trompicones; el beso que le da cuando se transforma en gato y el hecho de que después no se acuerde hace que la relación quede más confusa aún; luego la reaparición de Shampoo complica más las cosas; pero Akane no dejará de estar a su lado en los peores momentos de la historia, cuando la bisabuela de Shampoo le obliga a permanecer en cuerpo femenino y le da una paliza de las que hacen historia.
Otra prueba de fuego la pasa con la aparición del destructor de dojos y la cita simultánea con Shampoo; el dilema para Ranma es muy grave: defender a Akane o conseguir la cura para su transformación; al final, demuestra preferir a Akane antes que a Shampoo, pero demuestra no tener escrúpulos para engañar a Akane y conseguir comida extra y menos trabajo (la querrá mucho, pero no deja de ser un tipo mezquino este chico).
Uno de los momentos más complicados de la relación llega a la hora de interpretar "Romeo y Julieta", y aquí es donde se aprecia la asombrosa complejidad de la relación entre Ranma y Akane; la obra debe concluir con un beso, delante de gran cantidad de público; para Ranma un beso significa muchísimo (de hecho, en la cita con Shampoo no fue capaz de poder darle uno), y no está seguro de los sentimientos de Akane hacia él. En conclusión, es algo así como que la quiere demasiado como para obligarle a quererle a él, y por eso es incapaz de besarla. Baste recordar para confirmar esto la escena de la segunda parte en la que Akane cura a Ranma de las heridas de la pelea con Mikado y, cuando Akane le propone el beso, tras mucho intentarlo, Ranma le dice de manera sutil que a él si le gustaría, pero que también debe de gustarle a ella.
Por cierto, tras el falso beso de Akane al final de la obra de "Romeo y Julieta", Ranma se enfada bastante con ella.
Por último (hasta ahora), está la aparición de Ukyo, amiga de la infancia de Ranma (aunque él siempre pensó que era un chico), prometida a él por obra y gracia de Genma y que llega con ánimo de venganza hasta que Ranma le comenta lo bonita que es y ella decide que vuelve a ser su prometida. Su relación está basada en una sólida amistad y en el hecho de que Ukyo es la rival más legal de Akane (no es tan pérfida como Shampoo ni tan malvada como Kodachi).
Ranma volverá a tener problemas con la reaparición de Mousse, que tratará de convertirlo en pato para vengarse de él; en la pelea que tiene con él por Shampoo, Ranma se ve en la tesitura de elegir entre perder y así librarse de Shampoo o ser fiel a su tradición de ganar; e incluso en medio de la pelea llega a sentir auténtica pena por Mousse, de hecho polvo que llega a estar.
Una de las historias más divertidas será la que viva junto a Tsubasa Kurenai, la cual se enamorará locamente de Ranma mujer... para luego descubrir a Ranma hombre... y descubrir Ranma hombre que es en realidad un chico. Es destacable lo que se hiere el amor propio de Ranma cuando Tsubasa la llama fea; parece ser que tiene en mucha estima a su aspecto femenino, a pesar de que está tratando de librarse de él constantemente; también destacable su faceta como poeta ante Tsubasa (realmente ridículo).
De nuevo volveremos a apreciar lo gran tímido que es Ranma cuando vayan buscando el pergamino con la Happollamarada, es en la escena en la que se encuentra rodeada de media docena de mujeres desnudas cuando se aprecia bien: no sabe más que ruborizarse y disimular como puede, a pesar de seguir con su cuerpo femenino. A pesar de todo, es capaz de echar por la borda su miedo a que le descubran por defender a Akane del ataque de Happosai.
Pero pocas veces lo hemos pasado tan bien como en aquella historia en la que, debido a un hechizo de Shampoo, Ranma abraza a todo aquel que estornude; incluyendo a Kuno, al resto de sus compañeros, a Akane, a Shampoo-gato,... El pobre Ranma lo pasa fatal, quedando ante todo el instituto como un pervertido. Más tarde, su orgullo recibirá un severo correctivo cuando Akane consuma la super-soba, aunque al final se vengará de sus derrotas cuando Akane pierda la fuerza.
Y es con la aparición del director con la que Ranma se encuentra con un enemigo más, por si le faltaran. Parece que la mayor obsesión del director es cortarle su trenza, que para él es sagrada. La lucha por conseguir el coco del indulto pone a prueba la habilidad de Ranma, y sobre todo la capacidad de convencer a Kuno con su forma femenina, siendo la primera vez que fracasa. Al final, conseguirá su objetivo, aunque tendrá que volver a enfrentarse al director por no llegar tarde.
Después, a Ranma parece que se le abran las puertas del cielo cuando descubre el jabón anti-agua que le permitirá curarse. Sin embargo, la desgracia ha querido que el jabón haya caído en manos de Ryoga; así, Shampoo y Ranma se alían para conseguirlo, y la chica china no duda en meter a Akane por medio. A Ranma casi le da igual lo que pase entre Akane y Ryoga, supongo porque cree que nunca llegarán a nada, pero cuando ve a Akane abrazar a Ryoga casi le da un patatús. Se tragará la hiel de los celos cuando Ryoga tome a Akane en brazos y se vaya con ella, pero aún volverá a rescatarla de los efusivos abrazos de Ryoga, que casi matan a la pobre Akane. Finalmente, para desilusión suya y del resto, descubrirá que el jabón no funciona.
Pero los peores momentos de Ranma serán cuando Happosai le aplique la energibustión definitiva debilitadora. Ranma pierde toda su extraordinaria fuerza, quedando a merced de todos los enemigos que se quieran aprovechar de él. Por suerte, la ayuda de Colonia vendrá en buen momento. Pero lo que más le duele a Ranma es que Akane le vea en tal estado, algo que le confesará cuando le haga llorar por decirle que se vaya, que sólo se está entrometiendo. Con la ayuda de su padre, Ukyo, Akane, Ryoga y Colonia consigue aprender la técnica del Dragón Volador, con la cual se dirigirá a derrotar a Happosai.
Aunque al principio no consigue hacer al viejo caer en el truco, finalmente, usando fotos de su forma femenina en lencería, algo inimaginable para el orgulloso Ranma, consigue que Happosai le ataque y le aplica la técnica. Sin embargo, en el tornado que se forma, ve flotando a Akane y se lanza a por ella para rescatarla; Akane entró en el tornado para recuperar el esquema que le curaría. Ranma no se lo puede creer, y se promete no perder el esquema por nada del mundo después del riesgo que ha corrido Akane, pero el pergamino se deshace en el viento y Ranma se concentra en salvar a su prometida de la mortal caída.
Finalmente, consiguen salvarse, pero el esquema destrozado sólo ha podido reconstruirse en parte y Ranma parece sin cura. Éste se despide de todos dando las gracias, excepto de Akane, a la cual dedica su último pensamiento. Pero ella aparece y le sorprende diciendo que le acompañará allá donde vaya; Ranma, débil y desconsolado, llora como un niño, y Akane le pide que no se vaya, que tiene más cualidades que la fuerza; y cuando Ranma le pregunta cuales, ella es incapaz de encontrarlas y Ranma se enfada con ella. Pero justo entonces Colonia aparece y cura a Ranma, que pasa totalmente de Akane y se dedica a destrozar todo a su paso con su recuperada fuerza. Que tío más insensible.
Las posteriores aventuras de Ranma le llevarán a enfrentarse a Maomorin, un gato fantasma gigante, por culpa de Shampoo; y será la primera vez que se atreva a decirle a las claras a Shampoo lo que piensa de ella: que es una egoísta; pero Shampoo llora y le hace caer en una divertida trampa que hará que Ranma vuelva a usar el mítico puño de gato. Después "ayudará" a Akane en su entrenamiento de natación, tendrá un incidente con un niño vago llamado Yotaro y pondrá a prueba su amistad con Ryoga en la aventura de "La cara flotante de la felicidad", aunque su colaboración no sé si se debe más a su orgullo que a su amistad.
Más tarde, volverá de nuevo a mostrar sus ansias por tratar de recuperar la normalidad al tener una cita con Kuno, afortunado poseedor de la Manganmaru, espada que concede todo tipo de deseos. La cita entre ambos es memorable, pero Ranma es incapaz de superar la prueba final: darse un beso de fin de cita con Kuno. A pesar de todo, Kuno le concederá un deseo... ¿cuál?
Y sus aventuras continuarán con un viejo enemigo de la infancia: King, el rey del juego. Ranma no lo recuerda hasta que éste se lo enseña, pero de niño perdió el dojo Tendo a manos suyas, y King toma posesión del mismo. Como la situación es muy incómoda, se trasladará a casa de Ukyo, con la cual afianzará sus lazos de amistad a merced de un duro entrenamiento de juegos; y le hará una temible promesa: si pierde la partida final contra King, se marchará con ella para trabajar de cocinero. En esta aventura conocemos a un Ranma de habilidades infantiles en lo que respecta a los juegos de azar, y realmente muy tonto.
Alguna vez puede que os hayáis preguntado por qué Ranma lleva trenza. En la siguiente aventura se desvela la causa: estando en China y en forma femenina comió de un extraño arroz que lleva a los hombres a tener un crecimiento de pelo muy acelerado, pero con el inconveniente de que ese pelo acaba por caerse si no se sella adecuadamente. Así, Ranma ha llevado desde entonces la trenza sellada con un cordel llamado Bigote de Dragón, ingrediente fundamental de ése arroz. Y ahora debe protegerlo de una serie de enemigos cuyo único objetivo es conseguir una preciada cabellera: los hombres pastel, Happosai y su propio padre. Tras múltiples peripecias, Ranma consigue salvar su pelo, pero quedando plenamente consciente de que su destino futuro es ser tan calvo como su padre, algo que le hará pelearse con Genma (¿por ser el culpable?) hasta el fin de la aventura.
En las siguientes aventuras, la relación entre Ranma y Akane prosigue su curso de paso para adelante, paso para atrás (a veces en orden inverso). Por eso vemos a Ranma pasando inicialmente de la invitación a la carrera de los baños termales (posiblemente porque la intervención de Soun impidió que Ranma se enterara), para después formar pareja con Akane, llegando incluso a abandonar por salvarla, y haciendo una extraña confesión a la hora de planteársele la elección entre Akane y Shampoo; y Ranma lo pasa muy mal, porque para él la situación actual sigue siendo bastante cómoda
La siguiente prueba que pasa, en el duro entrenamiento de combate gastronómico, le sirve para conocer a un personaje por el que acabará sintiendo cierto aprecio, como es Picolet Shaldon; y aquí volvemos a ver su inquebrantable fuerza de voluntad. Pero uno de los momentos más decisivos de toda la historia viene con el cambio de prometida; en un arrebato de rabia, Akane cede a Nabiki el noviazgo; Ranma lo toma como un pataleta temporal, pero sigue el juego tratando de proteger a Nabiki de todos los peligros que le van a acechar en su dura competencia con el resto de prometidas. Pero la situación cambia por completo cuando Nabiki le confiesa que está enamorado de él.
Y la reacción de Ranma dista mucho de como se comporta con Akane: se transforma en un chiquillo tímido y nervioso cada vez que Nabiki se le acerca (si Akane se le declarara así, ¿ se comportaría igual? Creo que no). Pero pronto ve que Nabiki lleva con él más intenciones de hacer negocio que otra cosa. Pero como el comportamiento de Nabiki no le deja romper de una manera clara, decide transformarlo en una reconciliación con Akane, la cual no funciona porque Ranma no aprecia que realmente haya sentimientos implicados. Así decide continuar con Nabiki a pesar de no tener ningún sentimiento hacia ella; pero cuando Nabiki le pide un beso y él es incapaz de dárselo, provocando su llanto, se deshace y vuelve a su reafirmación de reconciliarse con Akane.
Pero Akane se le pone en plan duro, y delante de toda su clase le pregunta si quiere volver a ser su novio, provocando los rumores clásicos sobre los sentimientos de Ranma. Nuestro tímido héroe sale pitando antes de poder responder. Pero esa misma noche se entera de que Nabiki únicamente lo estaba utilizando y decide vengarse; su venganza es un tanto ridícula: únicamente quiere asustarla diciéndole que la quiere y que nunca cortará con ella. Sin embargo, una confusión en la cita en el parque hará que le diga esas cosas a Akane; y creo que es la única vez que se lo oiremos decir.
En general, la relación de Ranma se puede resumir en:
Amor hacia Akane, aunque por motivos de orgullo y miedo al rechazo lo mantiene oculto.
Cordial amistad para con Ukyo, Nabiki y Kasumi.
Amistad, a veces de conveniencia, con Shampoo.
Miedo por Kodachi (casi terror, diría yo).
Irreverencia para con su padre Genma (con un padre así es normal).
Respeto por Soun y el doctor Tofu.
Odio/respeto por Happosai y la bisabuela Colonia.
Rivalidad, pero deportiva, con Ryoga y Mousse.
Asco/rivalidad con Kuno (según el momento y si es chica o chico).
Extrañeza por Gosunkugi.
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