Los Tendo están cuidando a Kuno cuando se despierta, el cual ve a Akane y trata de llevársela. Ranma-h se sube a su cabeza y Kuno le pregunta quién es. Kuno no se acuerda ni de quién es él mismo; todos se sorprenden de su amnesia, y Ranma-h insiste preguntando si le recuerda. Akane lo moja y Kuno, a la vista de Ranma-m, parece recordarla: es la que se le declaró hace un tiempo. Ranma-m le da un puñetazo.
Nabiki le pregunta si se acuerda de ella y de los 5.000 yenes que le debe, que Kuno paga de inmediato. Kuno mira su katana preguntándose para qué sirve. Ranma-h le lanza una sandía, y Kuno la esquiva aterrorizado; Ranma-h corre con un carro de sandías hacia él, pero tropieza y todas salen volando hacia Kuno.
Kuno comienza a moverse extrañamente con la katana ante la atónita mirada de Akane, Ranma-h y el resto de bañistas. Ranma-h trata de pararlo, pero Kuno se revuelve y casi lo parte en dos. Finalmente, Kuno para con la mirada extraviada y todas las sandías han sido cortadas en deliciosos pedazos perfectos.
Kuno se arrodilla, agarrándose la cabeza, preguntándose cómo lo ha hecho y quién es. Ranma-h va a animarle, pero una ola cae sobre él, y al verle Kuno, se lanza sobre ella diciendo que comiencen su nueva historia de amor, mientras Ranma-m trata de escabullirse.
Ranma-m corre por la playa hacia Kuno y le da una patada de bienvenida que le deja KO. Coge una sandía y se la clava en la cabeza para que Kuno recuerde. El muchacho empieza a recordar que estaba entrenando para algo... ¡para ligar chicas! Y agarra a Ranma-m.
Ranma-m, harta, le enseña la carta, y al leerla Kuno dice que es una bonita carta de amor. Ranma-m le dice que es un reto, y Akane le pasa una tetera para que se transforme, pero Kuno la rompe antes y sale persiguiendo a Ranma-m diciendo que recordará si sale con él. Ranma-m va a entrar a unos baños calientes pero de dentro sale Kuno; y decide echarse en el agua con él, y lo despista al transformarse. Pero en cuanto sale vuelve a mojarse y Kuno sigue persiguiéndola.
Finalmente, Ranma-m salta al mar y se va a nado, perseguida por Kuno, hacia una isla cercana: la isla de las sandías. Los lugareños dicen que es una isla desierta con sólo sandías; Akane se da cuenta de que no hay manera de encontrar agua caliente allí.
Mientras, Ranma-m se esconde de Kuno en esa isla, y él comenta mientras la busca que son como Adán y Eva.
Mientras, Kuno y Ranma-m están cara a cara. Kuno la ataca diciendo que salga con él o muera; Ranma-m contraataca con sandías y una roca, que Kuno no esquiva. Pero a Ranma-m le cae una sandía en la cabeza y la deja inconsciente; Kuno se levanta y va hacia ella... y tras muchos años, Ranma-m, Kuno y sus niños viven felices en la isla.
Ranma-m se levanta y golpea a Kuno, y suspira de alivio al ver que era un sueño. Se da cuenta de que están en un salón de té abandonado, y sale de allí, aunque Kuno le insiste en que tiene que hacerle recobrar la memoria. De repente, le advierte de que hay una cascada, y efectivamente, Ranma-m ahí la ve y le pregunta cómo la recuerda. Kuno piensa... y la abraza; Ranma-m le golpea y Kuno empieza a mirar con más detenimiento la cascada.
Akane mientras sigue explorando la isla tetera en mano. Llega un río y ve un montón de sandías flotando sujetas por una red y un cartel que indica a los que se entrenan que tiren de la cuerda. Akane tira y las sandías se liberan, siguiendo río abajo.
Mientras, Kuno y Ranma-m siguen intentando recordar. Pero Kuno flaquea y le dice a Ranma-m que si intercambian sus diarios podrá recordar mejor. Al gritarle Ranma-m, Kuno se enfada y sale tras ella katana en mano; Ranma-m corre hacia la cascada y de repente una lluvia de sandías cae sobre ellos. Kuno comienza a partirlas como poseso. A cada sandía que le lanza Ranma-m la parte sin inmutarse, y Ranma-m se inventa un truco. Se lanza a los brazos de Kuno y le pone una sandía sobre la cabeza, que Kuno automáticamente trata de partir, dejándosela clavada y quedando inconsciente.
Justo entonces llega Akane. Ranma-h y Akane esperan que Kuno despierte, mientras Ranma-h le cuenta que al entrenarse Kuno allí, por reflejo cortaba las sandías, y al caerle una sobre la cabeza y tratar de partirla, había perdido la memoria. Kuno se despierta y reconoce a ambos; Ranma-h le confiesa que ha conseguido una gran habilidad con la espada y que le podría ganar, y Kuno no entiende que le dice.
Ranma-h le enseña la carta de reto y Kuno le dice que era una carta de amor para la chica de la trenza, a la que le quería enseñar su habilidad cortando sandías. Akane pregunta a Ranma-h si quiere agua fría, y Ranma-h le dice que bromea.
Anterior historia: Pantyhose Taro, el demonio que vino de Jusenkyo. |
Índice |
Siguiente historia: La salsa especial de Ukyo. |